14.05.2013 Views

Volumen VIII – El chiste y su relación con lo inconsciente (1905)

Volumen VIII – El chiste y su relación con lo inconsciente (1905)

Volumen VIII – El chiste y su relación con lo inconsciente (1905)

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

En el caso del <strong>chiste</strong>, la diferencia entre dos maneras de<br />

<strong>con</strong>cepción cjue se ofrecen simultáneamente y trabajan <strong>con</strong><br />

un pasto desigual cuenta para el proceso c^ue ocurre en el<br />

oyente. Una de esas dos <strong>con</strong>cepciones, siguiendo las indicaciones<br />

<strong>con</strong>tenidas en el <strong>chiste</strong>, recorre el camino de <strong>lo</strong> pensado<br />

a ira ves de <strong>lo</strong> in<strong>con</strong>ciente; la otra permanece en la<br />

<strong>su</strong>per! it ic y se representa al <strong>chiste</strong> como a cualquier otro<br />

texto ciex'cnido <strong>con</strong>ciente desde <strong>lo</strong> pre<strong>con</strong>ciente [pág. 203].<br />

Acasi! no sería una exposición ilícita derivar el placer del<br />

<strong>chiste</strong> escuchado a partir de la diferencia entre estas dos maneras<br />

de representación."''<br />

Lo Ljiie aquí enunciamos acerca del <strong>chiste</strong> es <strong>lo</strong> mismo que<br />

hemos descrito cojno <strong>su</strong> cabeza de jano Ipáfí. 203] cuando<br />

la rehiciíHi entre <strong>chiste</strong> y comicidad se nos presentaba aún<br />

no trainilada.'"<br />

En el caso del humor desaparece ese carácter aquí situado<br />

en un primer plano. Es cierto que registramos el placer humorístico<br />

toda vez que se evita una moción de sentimiento<br />

que habríamos esperado, por hábito, como ]iropia de la situación,<br />

y cjue en esa medida también el humor cae dentro<br />

del <strong>con</strong>cepto ampliado de la comicidad de expectativa. Pero<br />

en el hunior ya no se trata de dos diversas maneras de representar<br />

un mismo <strong>con</strong>tenido; el hecho de que la situación<br />

esté dominada por una excitación de sentimiento a evitar,<br />

de carácter displacentero, pone término a toda posibilidad de<br />

•'•'• Ps p(is¡b!c ;ilcncrsc .sin más a esta fórmula, pues no lleva a nada<br />

que <strong>con</strong>tradiga nuestras anteriores elucidaciones. La diferencia entre<br />

<strong>lo</strong>s dos gastos tiene ciue reducirse en <strong>lo</strong> esencial al gasto de inhibición<br />

ahorrado. La falta de esc ahorro de inhibición en <strong>lo</strong> cómico y la ausencia<br />

del <strong>con</strong>traste cuantitativo en el <strong>chiste</strong> <strong>con</strong>dicionarían la diferencia<br />

del sentimiento cómico respecto de la impresión del <strong>chiste</strong>, a pesar de<br />

que ambos coincidan en emplear un trabajo de representación de dos<br />

clases para la misma <strong>con</strong>cepción.<br />

•" Desde luego, a <strong>lo</strong>s autores no se les ha escapado la peculiaridad<br />

de la «double ¡ace». Me'linand (1895), de quien tomo la expresión del<br />

texto, re<strong>su</strong>me la <strong>con</strong>dición de la risa en la siguiente fórmula: «Ce qui<br />

[ah r'ire, c'est ce qui est a la ¡ais, d'un colé, ahstirdc et de l'aiitrc, jamilicr»<br />

{

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!