18.05.2013 Views

Islas en la red

Islas en la red

Islas en la red

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Ahora Laura se s<strong>en</strong>tía un poco mejor. Compr<strong>en</strong>día a<br />

Sticky. La feroz lucha que habían sost<strong>en</strong>ido antes<br />

parecía casi confortable ahora..., como algo<br />

necesario. Ahora él <strong>la</strong> miraba, no como una loncha<br />

de buey o un <strong>en</strong>emigo, sino con el tipo de expresión<br />

que el<strong>la</strong> estaba acostumbrada a conseguir de los<br />

hombres. Un poco impresionada quizá, pero propia<br />

de un ser humano. Sintió una rep<strong>en</strong>tina oleada de<br />

camaradería hacia él..., casi se creyó capaz de poder<br />

abrazarle. O al m<strong>en</strong>os invitarle a c<strong>en</strong>ar.<br />

Sticky se miró <strong>la</strong>s botas.<br />

—¿Dijeron que era usted un rehén? —dijo<br />

t<strong>en</strong>sam<strong>en</strong>te—. ¿Dijeron que iban a fusi<strong>la</strong>r<strong>la</strong>?<br />

—No —respondió Laura—. Quier<strong>en</strong> contratarnos.<br />

Para que trabajemos por Granada.<br />

Sticky se echó a reír.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!