18.05.2013 Views

Islas en la red

Islas en la red

Islas en la red

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—Mire, conozco a g<strong>en</strong>te allá. El viejo señor Shaw,<br />

un par de sus guardias. Fueron huéspedes <strong>en</strong> mi<br />

casa. Me lo deb<strong>en</strong>.<br />

—No, no. —Se llevó una mano a <strong>la</strong> boca.<br />

― Me lo deb<strong>en</strong>. Los muy estúpidos bastardos, ¿para<br />

qué otra cosa sirv<strong>en</strong>? ¿Qué van a hacerme,<br />

dispararme? Eso armaría un gran revuelo <strong>en</strong> el<br />

Par<strong>la</strong>m<strong>en</strong>to, ¿no? Demonios, no les temo..., voy a ir<br />

ahora mismo. —Se puso <strong>en</strong> pie.<br />

―Es muy tarde ―dijo<br />

tímidam<strong>en</strong>te Suv<strong>en</strong>dra.<br />

—Son un banco, ¿no? Los bancos están abiertos <strong>la</strong>s<br />

veinticuatro horas.<br />

El hombre alzó <strong>la</strong> vista hacia el<strong>la</strong>.<br />

― ¿Son todos como usted, ahí <strong>en</strong> Texas?­ Laura<br />

frunció el ceño.<br />

—¿Qué se supone que quiere decir con esto?

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!