18.05.2013 Views

Islas en la red

Islas en la red

Islas en la red

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Muy modesto. Tres chicos de aspecto intelig<strong>en</strong>te<br />

aparecieron <strong>en</strong> <strong>la</strong> habitación de<strong>la</strong>ntera: un niño de<br />

nueve años, una niña, y otro chico que ap<strong>en</strong>as<br />

gateaba.<br />

―¿Ti<strong>en</strong>e<br />

usted tres hijos, señor Singh?<br />

—Sí —dijo Singh con una sonrisa. Tomó al chico<br />

más pequeño y le revolvió el pelo­. Crea un montón<br />

de problemas con los impuestos. He de trabajar <strong>en</strong><br />

dos sitios.<br />

—Él y su esposa empezaron a hab<strong>la</strong>r rápidam<strong>en</strong>te<br />

<strong>en</strong> b<strong>en</strong>galí, o quizás <strong>en</strong> hindi, algo incompr<strong>en</strong>sible,<br />

pero salpicado con pa<strong>la</strong>bras inglesas como reactor<br />

de combate y televisión.<br />

La señora Singh, cuyo nombre era Aratavari o algo<br />

vagam<strong>en</strong>te simi<strong>la</strong>r, llevó a Laura al dormitorio<br />

principal.<br />

—Le daré algunas ropas secas —dijo. Abrió el<br />

armario y tomó algo del estante superior. Era

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!