01.11.2012 Views

Arrancame la vida

Arrancame la vida

Arrancame la vida

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

-Ya leí el manifiesto de los delegados a <strong>la</strong> reunión de <strong>la</strong> CTM -comenté.<br />

-¿En dónde lo leíste?<br />

-En El Universal. Lo compré aprovechando que salí. No sé por qué me dio<br />

por el encierro, pero ahora que volví a ver <strong>la</strong> calle me sentí otra. Si no me<br />

quieres dar a Juan, dame a otro chofer o deja que aprenda yo a manejar.<br />

-Ay qué mujer tan chirrisca. Estaba seguro de que no aguantarías quieta<br />

más de 6 meses. ¿Cómo te fue en <strong>la</strong> Unión? ¿Vas a servir de algo?<br />

Me quedé cal<strong>la</strong>da un momento. Costaba trabajo inventarle, era como un<br />

espía invisible pero siempre tras <strong>la</strong> puerta sabiéndolo todo.<br />

-C<strong>la</strong>ro que no voy a servir de nada. Para trabajar en eso me hubiera yo<br />

metido de hermana de <strong>la</strong> caridad y siquiera sabría yo mi lugar en el<br />

mundo. Pero entrarle a <strong>la</strong> confusión mental de <strong>la</strong>s viejas esas, ni loca. Yo<br />

no necesito que el padre Falito me diga por dónde caminar y tengo mucho<br />

qué ver como para meterme a una casa fría a llenar bolsas de chochitos<br />

para unos presos a los que les van a rifar escapu<strong>la</strong>rios. Además a mí los<br />

comunistas todavía no me hacen nada y no me gustan los enemigos<br />

gratuitos. Yo creo que si se mete uno a eso de <strong>la</strong>s caridades tiene que ser<br />

a lo grande; siquiera quedar como San Francisco: con los pobres tras uno<br />

bendiciéndo<strong>la</strong>. Yo de pendeja en <strong>la</strong> grey del padre Falito soñando niños y<br />

rezándoles a los presos, primero muerta.<br />

Andrés soltó una carcajada y sentí alivio.<br />

-¿Cómo dices que se l<strong>la</strong>ma el cura? ¿Falito? Qué locura. Tienes razón, una<br />

cosa es que a mí esos pendejos me vayan a dar una ayudada en el asunto<br />

de chingar a Cordera, y otra que te haga yo <strong>la</strong> maldad de meterte ahí. A<br />

ésos les hubiera llevado a una de <strong>la</strong>s niñas. A Marta que le da por ahí y<br />

hasta sería buena informante, pero a quién se le ocurre llevarte a ti.<br />

¿Cómo te habré visto de loca? Eso te pasa por recibirme de mal modo -y<br />

volvió a reír. Oye, ¿y conociste a Falito? ¿Cuántas de ahí crees que ya le<br />

hayan visto el nombre de cerca? Dónde te fui a llevar. Mereces un<br />

desagravio. Desde hoy vas conmigo a todas partes. Se acabó el encierro.<br />

Así lo dec<strong>la</strong>ró y así fue porque él quiso, porque él así era. Iba y venía como<br />

el pinche mar. Y esos días tuvo a bien regresar.<br />

-Tengo que volver a Pa<strong>la</strong>cio. El Gordo no puede hacer nada solo -dijo. Ven<br />

conmigo. Total, te vas al centro y a ver qué compras en tres horas. A <strong>la</strong>s<br />

ocho que cierren vuelves por mí y te invito a cenar en Prendes. ¿Te parece<br />

mi p<strong>la</strong>n?<br />

Fui por mi abrigo y me subí al coche en tres minutos, no se me fuera a<br />

arrepentir de <strong>la</strong> invitación. Hacía frío, una de esas raras tardes de febrero<br />

en que uno puede ponerse abrigo de pieles sin sentir calor a media calle.<br />

Me puse un abrigo de zorro. El más bonito que he tenido. Porque <strong>la</strong>s pieles<br />

a veces son cursis, pero ese de zorro, me lo ponía con botas y me sentía<br />

87

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!