Descargar Ilustres conocidos (pdf) - Municipalidad de Morón
Descargar Ilustres conocidos (pdf) - Municipalidad de Morón
Descargar Ilustres conocidos (pdf) - Municipalidad de Morón
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Dicen que los actores nacen así. ¿Es verdad? Yo<br />
creo que en el vientre <strong>de</strong> mi madre ya hacía morisquetas.<br />
Nací un 19 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 1922 en una familia <strong>de</strong> actores.<br />
Recuerdo las charlas <strong>de</strong> sobremesa, hablar <strong>de</strong><br />
giras, éxitos, fracasos, ensayos, estrenos. En Caballito,<br />
en la calle Bacacay 665 frente a la vía <strong>de</strong>l ferrocarril,<br />
don<strong>de</strong> hice los primeros palotes, contemplaba junto a<br />
mis hermanos Margot y Mario los baúles con perfume<br />
a naftalina, con ropa <strong>de</strong> teatro, peluca, barba, bigotes,<br />
cajas <strong>de</strong> maquillajes, uniformes militares, capas, sombreros,<br />
botas, zapatos, sacones. Todo el vestuario <strong>de</strong> mi<br />
padre y <strong>de</strong> mi tío Humberto, que utilizaban en las giras.<br />
Los baúles estaban cubiertos con calcomanías en<br />
colores <strong>de</strong> los hoteles don<strong>de</strong> se alojaban.<br />
Una familia <strong>de</strong> artistas… Sí. Mi abuela materna Aída<br />
Celestino y mi padrino habían actuado en la compañía<br />
<strong>de</strong> los famosos hermanos Po<strong>de</strong>stá, creadores <strong>de</strong>l teatro<br />
nacional. Por otro lado, mi tía fue la inolvidable Elsa<br />
O´Connor, <strong>de</strong> modo que aprendí <strong>de</strong>s<strong>de</strong> chico a amar esta<br />
profesión. Mi abuelo, también Ricardo Passano, fue<br />
el fundador <strong>de</strong>l teatro <strong>de</strong> Montevi<strong>de</strong>o, autor y director.<br />
Mi padre, también actor, me llevaba al teatro, me colocaba<br />
en cajas para observar el movimiento <strong>de</strong> los actores,<br />
los cambios <strong>de</strong> <strong>de</strong>corados, la utilería, los maquinistas<br />
que subían y bajaban el telón.<br />
¿Qué edad tenía cuando empezó a actuar? Empecé<br />
en radio El Mundo a los 12 años en el programa “La<br />
Pandilla <strong>de</strong> Tony”, una emisión. Después insistí tanto que<br />
cuando tenía 15 años mi mamá me dio una tarjeta para<br />
ir a ver a la extraordinaria actriz Gloria Ferrandiz, que<br />
tenía un programa en radio Splendid, “Tar<strong>de</strong> <strong>de</strong> Vosotras”,<br />
auspiciado por la revista Vosotras. Por la tar<strong>de</strong> estaba<br />
la famosa compañía <strong>de</strong> Nora Cullen y Guillermo<br />
Bataglia. Fui con la tarjeta firmada por Amelia Martí,<br />
una tía <strong>de</strong> mi mamá. Recién me ponía los pantalones largos.<br />
Gloria me atendió muy bien y me dijo que conocía<br />
a mi padre. Me probó, y comencé en el programa “Qué<br />
lindo es estar <strong>de</strong> novios”.<br />
Después aparece el cine, don<strong>de</strong> tiene la suerte<br />
<strong>de</strong> compartir escena con los gran<strong>de</strong>s exponentes<br />
<strong>de</strong> una época <strong>de</strong> oro, como se la recuerda.<br />
Efectivamente, fueron años increíbles. Estaba haciendo<br />
en radio “Reviviendo la emoción <strong>de</strong>l tango”, don<strong>de</strong> encarnaba<br />
un personaje dramático. Cuando terminó el programa,<br />
un señor bajito se acercó y me dijo: “Joven <strong>de</strong>me<br />
su teléfono”. Yo no sabía quién era; les pregunté a mis<br />
compañeros si lo conocían y me dijeron: “Te paraste, te<br />
paraste Passanito. Es el doctor Guerrico, el dueño <strong>de</strong><br />
Lumiton”. Y así entré para una prueba, ahora llamado casting,<br />
en la primer película, “El mejor papá <strong>de</strong>l Mundo”, con<br />
Elías Alippi y Angel Magaña. Luego filmé “Noche <strong>de</strong><br />
bodas”, con Paulina Singerman y (Enrique) Serrano.<br />
Con esa gente yo aprendía. Mirando, porque nunca fui a<br />
ninguna aca<strong>de</strong>mia.<br />
Juvenilia es su consagración, sin duda. También<br />
fue un momento inolvidable. Había vuelto a lo mío, la radio.<br />
Y un día, en un pasillo, un compañero me dice:<br />
“Passanito, están buscando muchachos para una gran<br />
película, basada en el libro <strong>de</strong> Miguel Cané. Vaya a verlo<br />
a Peña Rodríguez.” Era el productor <strong>de</strong> Juvenilia (Augusto<br />
C. Vatteone, 1943). A la prueba fui sin hacerme la menor<br />
ilusión, sabía que se habían probado más <strong>de</strong> cien,<br />
entre ellos Carlos Thompson. No teníamos teléfono.<br />
Yo había dado el <strong>de</strong> la pana<strong>de</strong>ría. Un día viene el pana<strong>de</strong>ro<br />
y me avisa: “Che, Richard, te llama tu representante”.<br />
Lo llamo y el viejo me dice: “Pibe, agárrese fuerte:<br />
¡la película la hace usted!”. Estábamos en pleno rodaje<br />
y yo no lo podía creer. Entraba al bar <strong>de</strong> Estudios San<br />
Miguel y en las otras mesas estaban Francisco Petrone,<br />
Sebastián Chiola... ¿A quién no se le hubieran caído<br />
las medias? En esa película, aparte <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s actores<br />
adultos como José Olarra y Ernesto Vilches, había<br />
una pandilla memorable: Mario Medrano, Gogó<br />
Andreu, Hugo Pimentel, Marcos Zucker, Elisa<br />
Galvé...<br />
¿Y en el teatro cómo arrancó? Lo que me vino bien<br />
fue que tenía mucho nombre en el cine. Resulta que se<br />
preparó una gran comedia llamada “Mi querida Ruth”,<br />
que iba a tener por protagonista a Magaña, pero él pidió<br />
mucho dinero y entonces llamaron al chico que estaba<br />
en el can<strong>de</strong>lero. Me llevaron para formar pareja con<br />
Aída Luz.<br />
A usted también se lo recuerda por ser el primero<br />
en besar a Lolita Torres… Es otra gran anécdota. Fue<br />
en “Ritmo, sal y pimienta”. ¡El viejo <strong>de</strong> ella no quería saber<br />
nada con que la besaran! Tuvimos que llevarlo a<br />
tomar un café para que pudiéramos hacer la escena.<br />
I L U S T R E S C O N O C I D O S • 1 1 5