1 - Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales

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224 ASTRONOMÍA.
rotación del sol és de 4,g. d i2. h La analogía nos
lleva á creer que Mercurio y Júpiter tienen igualmente
sus movimientos de rotación; pero por la mucha
proximidad del primero al sol, estando casi
siempre envuelto en sus rayos, y por la mucha distancia
del segundo no podemos saber si le tienen
porque no podemos ver sus manchas.
SECCIÓN
SÉPTIMA.
De los satélites y planetas secundarios.
§. LXVÍI.
V>on ser la luna un cuerpo tan visible, cuyas faaatas
secun- ses gon tan notables y de tanta utilidad para la
Qué son pía
darios: la *
luna es una tierra no ha merecido hasta ahora lugar en nuesde
ellos. Qué . . . . . ,,,
cosa es mes tras observaciones, y solo por incidencia se habló
snódiw°, y de sus fases y eclipses; y quando hemos explicado
en eiia C ' * •! sistema de Copernico la colocamos de modo que
girando todos los demás astros al rededor del sol,
ella • era la única que se apartaba de este centro
girando al rededor de la tierra. Nos convenceremos
de que este es el verdadero lugar que debe
dársele si reparamos que sin embargo de que es el
mas próximo de los cuerpos que andan al rededor
de nosotros, se halla en oposición y en quadratu-
CAPÍTULO PRIMERO. 2 2 5
ra con el sol, lo que no sucede á Mercurio, ni Venus.
Por tener la luna por centro de revolución
á un planeta que está sujeto á girar al rededor
de otro astro, se le llama planeta secundario ó
satélite, y en efecto gira secundariamente al rede-
-dor del sol, porque al hacerlo la tierra al rededor
de este astro la va acompañando continuamente, y
-hace sus revoluciones al rededor de la tierra en
cada 27. a *r. h 43' y es lo que se llama su revolución
periódica. Pero según que la luna concluye su
revolución comparándola con las estrellas fixas, ó
comparándola con la tierra' hay diferencia de periodos.
Supóngase para esto que sea S el sol, TB F¡
una porción de la órbita de la tierra, y el círculo
LON represente la órbita de la luna, para correr
la qual necesita los 27/ 1 jr. h 43'. Supongamos que
la luna se halle en su conjunción L, si la tierra se
estuviese quieta en T tardaría en volverse á hallar
en el mismo punto L el tiempo dicho; pero si ai
mismo tiempo que la luna hace su revolución la
tierra se mueve desde T á B, como que la órbita
de la luna sigue á la tierra, quando la luna se
halle en /, habrá concluido su revolución respecto de
las estrellas fixas, porque la /R es paralela á LT;
pero no se hallará todavía en conjunción con la
tierra, y l e faltará la porción li, que por ser el
ángulo IB i ig ua i al BST es un arco igual al que
4t.