1 - Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales

•364 ASTRONOMÍA.
f¡g. 4g. gura esférica ANBO, circundada de un menisco
ANMBORA que en los polos A y B no tiene
grueso alguno; pero que desde estos puntos hasta
los del equador M y R va creciendo, y este menisco
ó materia sobrante á la esfera de la tierra es
la causa del defecto de paralelismo en el exe de
la tierra de donde procede la precesión de los equinoccios.
Concurren para ello el sol y la luna; pues
como las órbitas de estos dos astros están inclinadas
al plano del equador de la tierra obran sobre
él, como sobre una serie de satélites que circundaten
á la tierra, del mismo modo que hemos visto
que el sol obra sobre la luna. Las circunstancias
•son las mismas, porque si fixamos la atención en
un punto solo de este menisco en el M por exemplo
, le podremos considerar como un satélite que
gira al rededor de la tierfa en 24. h á la distancia
CM d«I centro. El sol que actúa sobre él haciendo
los mismos efectos que hacia con la luna en su
-órbita, ha de procurar disminuir su obliqüidad y
hacer retroceder la línea de los nudos: la luna
igualmente como que actúa sobre él á una distancia
mucho menor que la del sol, ha de producir los
mismos eíectos, pero mucho mas sensibles. Lo mismo
que se dice del punto M se puede aplicar á todos
los del menisco con solo la diferencia de que
los círculos de revolución de los mas próximos al
CAPÍTULO SEGUNDO. 365
polo son de menor diámetro que los otros mas retirados
de estos puntos. Es, pues, una serie de satélites,
cuyas órbitas son alteradas por la acción
del sol y de la luna del mismo modo que lo era
la de la luna por la acción del sol. Pero como este
menisco no está separado de la tierra, el efecto
producido en él no puede menos de ser repartido
entre toda la masa de este globo, y por esto toda
la variación que debia padecer, la inclinación de
este anillo respecto de la ecliptica, se refunde en
un solo movimiento ocasionado á la tierra, haciéndola
que á cada instante mude su exe, y se revuelva
al rededor de puntos diferentes.
5. LXX.
De los 50" de retrocesión de los puntos equinocciales
que hemos dicho que correspondían en
cada año, 36 de ellos lo menos son causados por
la acción de la luna; pero esta no puede producir
sus efectos con uniformidad, porque los nudos de
su órbita varían continuamente, también varía su
inclinación respecto del equador, y por consiguiente
debe haber una cierta desigualdad todos los años,
procediendo de esto un cierto balanceo en el exe
de la tierra, aproximándose y retirándose al de la
ecliptica, pues según que la inclinación de la órbita
de la luna sea mayor ó menor, procurará es-
La nutación
del exe déla
tierra depende
de la desigualdad
del
modo de
obrar la luna
para producir
la precesión
de los
equinoccios.
. •
'.. llj
1
'; M
'."•'l
A \B