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Documento para Aprobación Provisional
PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN URBANA DEL MUNICIPIO DE VILLAQUILAMBRE
CAPÍTULO IX. SUELO RÚSTICO CON PROTECCIÓN ESPECIAL
Artículo 342. Identificación y definición
1. Corresponde con aquellos suelos rústicos que, por sus características, están amenazados
por riegos naturales o significan por sí mismos un riesgo para su ocupación humana, así
como aquellos otros que, aun no contando con tales características, desde sus
características propias o de posición relativa, aportan al modelo de ordenación adoptado
unos valores naturales, medioambientales, paisajísticos, o de cualquier otro orden que,
aunque no relevantes por sí mismos, están poco alterados.
2. Los terrenos incluidos en esta categoría de suelo aparecen en los planos de este Plan
grafiados con las letras SR-PE en su interior.
Artículo 343. Régimen urbanístico de los usos
En suelo rústico con protección especial por estar sometido a algún régimen de protección singular
conforme a la legislación sectorial o de ordenación del territorio, debe aplicarse el régimen
establecido en dicha legislación y en los instrumentos de planificación sectorial y ordenación del
territorio que la desarrollen.
En el resto del suelo rústico con protección especial se aplica el siguiente régimen de usos:
1. Usos permitidos: Son usos permitidos en suelo rústico de protección con protección
especial cualquier uso no constructivo vinculado a la utilización racional de los recursos
naturales, que no altere la naturaleza rústica de los terrenos, tales como la explotación
agrícola, ganadera, forestal, piscícola y cinegética, o las actividades culturales, científicas,
educativas, deportivas, recreativas, turísticas y similares que sean propias del suelo rústico,
y en condiciones de cumplir cuanta normativa pudiera resultar de aplicación.
2. Usos autorizables: Podrán ser autorizables en esta zona de aplicación los siguientes usos:
– Construcciones e instalaciones vinculadas a explotaciones agrícolas, ganaderas,
forestales, piscícolas ó cinegéticas.
– Actividades extractivas, incluidas las explotaciones mineras bajo tierra y a cielo
abierto, las canteras y las extracciones de áridos o tierras, así como las
construcciones e instalaciones vinculadas a su funcionamiento.
– Obras públicas e infraestructuras en general, así como las construcciones e
instalaciones vinculadas a su ejecución, conservación y servicio.
– Construcciones e instalaciones propias de los asentamientos tradicionales, incluidas
las necesarias para la obtención de los materiales de construcción característicos
del propio asentamiento.
– Obras de rehabilitación, reforma, conservación y consolidación de las edificaciones
existentes que no estén expresamente declaradas fuera de ordenación.
– Usos que puedan considerarse de interés público porque se aprecie la necesidad de
su emplazamiento en suelo rústico, ya sea a causa de sus específicos
requerimientos en materia de ubicación, superficie, accesos, ventilación u otras
circunstancias especiales, o por su incompatibilidad con los usos urbanos.
– Otros usos que puedan considerarse de interés público por estar vinculados a
cualquier forma de servicio público.
LIBRO III. NORMATIVA Y ANEXOS A LA NORMATIVA. PARTE I. NORMATIVA URBANÍSTICA PÁGINA 154