22.01.2015 Views

El Trabajo Infantil Doméstico en Honduras. A Puerta Cerrada..., 2003

El Trabajo Infantil Doméstico en Honduras. A Puerta Cerrada..., 2003

El Trabajo Infantil Doméstico en Honduras. A Puerta Cerrada..., 2003

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

“Durante trabajé como empleada doméstica cambié a varios empleos siempre <strong>en</strong> lo<br />

mismo, me cambiaba porque a veces algunos eran groseros y otras porque me iban a<br />

dar unos c<strong>en</strong>tavos más, siempre esperando cambiar pero casi <strong>en</strong> todos lados me fue<br />

igual”.<br />

Cuando no resist<strong>en</strong> las condiciones de trabajo <strong>en</strong> una casa, se van a otra, a veces casi<br />

huy<strong>en</strong>do. En un grupo focal fue com<strong>en</strong>tada la experi<strong>en</strong>cia de una chica m<strong>en</strong>or de 18<br />

años que <strong>en</strong>tró a trabajar <strong>en</strong> la casa de una familia de clase alta <strong>en</strong> San Pedro Sula,<br />

donde prácticam<strong>en</strong>te la secuestraron durante quince días cuando quiso abandonar el<br />

trabajo, det<strong>en</strong>ida por los guardias armados que había <strong>en</strong> la puerta, porque según la<br />

patrona, debía completar un mínimo de quince días laborables. Tuvo que escaparse<br />

por la tapia del patio dejando sus pert<strong>en</strong><strong>en</strong>cias, sin recuperar el salario. En otro caso,<br />

una ex trabajadora doméstica que llegó a Tegucigalpa a emplearse como TID a los<br />

catorce años, para poder estudiar, recuerda el s<strong>en</strong>timi<strong>en</strong>to de humillación cuando las<br />

patronas le gritaban bruta e inútil, como mecanismo de intimidación y de presión.<br />

Para evitar ese trato humillante, trabajó rotando de empleo <strong>en</strong> veinticinco casas<br />

difer<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> m<strong>en</strong>os de un año.<br />

83<br />

Y <strong>en</strong> las historias de otras trabajadoras domésticas <strong>en</strong>trevistadas que com<strong>en</strong>zaron a<br />

trabajar desde niñas, se reflejaron también las experi<strong>en</strong>cias de hostigami<strong>en</strong>to y abuso<br />

sexual de parte de los patrones o hijos mayores de la casa:<br />

”En uno de los trabajos había un patrón que cuando yo estaba <strong>en</strong> la cocina siempre<br />

estaba queriéndome tocar y diciéndome cosas, me s<strong>en</strong>tía acosada cuando él hacía eso,<br />

como no había solución me fui del trabajo”.<br />

Este abuso no se d<strong>en</strong>uncia, las afectadas ti<strong>en</strong><strong>en</strong> miedo, no sab<strong>en</strong> dónde pedir ayuda y<br />

la propia familia de la niña manti<strong>en</strong>e el sil<strong>en</strong>cio por temor a sufrir represalias de parte<br />

del patrón, o porque consideran que no van a lograr nada con la d<strong>en</strong>uncia. En los grupos<br />

focales se id<strong>en</strong>tificaron casos de TID embarazadas por sus patrones, y varios casos de<br />

acoso sexual. Una de las participantes manifestó que su sobrina de 16 años fue abusada<br />

por el patrón y cuando salió embarazada la despidió sin reconocer la paternidad del<br />

niño. La falta de comunicación <strong>en</strong>tre los empleadores y la familia de las chicas, y la<br />

desprotección legal e institucional <strong>en</strong> que están las TID da lugar a que el abuso<br />

permanezca <strong>en</strong> la impunidad.<br />

También ese desamparo se refleja <strong>en</strong> otras formas de abuso sexual y viol<strong>en</strong>cia a las que<br />

están expuestas <strong>en</strong> las ciudades, como el riesgo de que se involucr<strong>en</strong> <strong>en</strong> relaciones de<br />

pareja que las conduce a la maternidad no deseada que luego ti<strong>en</strong><strong>en</strong> que <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tar solas<br />

porque los hombres no asum<strong>en</strong> la paternidad. Esas relaciones a veces ti<strong>en</strong><strong>en</strong> sesgos de<br />

viol<strong>en</strong>cia, no siempre son cons<strong>en</strong>tidas; ser violadas, raptadas o sufrir <strong>en</strong>gaño,<br />

repres<strong>en</strong>tan riesgos que afectan a este sector de niñas trabajadoras que por su mismo<br />

desconocimi<strong>en</strong>to del medio urbano, el <strong>en</strong>cierro <strong>en</strong> que permanec<strong>en</strong>, y las escasas<br />

relaciones que frecu<strong>en</strong>tan, son vulnerables a ese tipo de agresiones.<br />

<strong>El</strong> increm<strong>en</strong>to de las maras o pandillas urbanas que establec<strong>en</strong> dominios territoriales <strong>en</strong><br />

ciertas zonas de las ciudades, está t<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do repercusiones graves <strong>en</strong> la pérdida de la<br />

CAPÍTULO 5 - REPRESENTACIONES SOCIALES

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!