28.01.2016 Views

50sombras 168

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

—¿Qué pasa? ¿Qué te ha hecho ese repulsivo cabrón guaperas?<br />

—Nada que no quisiera que me hiciera, Kate.<br />

Me lleva hasta la cama y nos sentamos.<br />

—Tienes el pelo de haber echado un polvo espantoso.<br />

Aunque estoy desconsolada, me río.<br />

—Ha sido un buen polvo, para nada espantoso.<br />

Kate sonríe.<br />

—Mejor. ¿Por qué lloras? Tú nunca lloras.<br />

Coge el cepillo de la mesita de noche, se sienta a mi lado y empieza a<br />

desenredarme los nudos muy despacio.<br />

—¿No me dijiste que habías quedado con él el miércoles?<br />

—Sí, en eso habíamos quedado.<br />

—¿Y por qué se ha pasado hoy por aquí?<br />

—Porque le he mandado un e-mail.<br />

—¿Pidiéndole que se pasara?<br />

—No, diciéndole que no quería volver a verlo.<br />

—¿Y se presenta aquí? Ana, es genial.<br />

—La verdad es que era una broma.<br />

—Vaya, ahora sí que no entiendo nada.<br />

Me armo de paciencia y le explico de qué iba mi e-mail sin entrar en detalles.<br />

—Pensaste que te respondería por correo.<br />

—Sí.<br />

—Pero lo que ha hecho ha sido presentarse aquí.<br />

—Sí.<br />

—Te habrá dicho que está loco por ti.<br />

Frunzo el ceño. ¿Christian loco por mí? Difícilmente. Solo está buscando un<br />

nuevo juguete, un nuevo y adecuado juguete con el que acostarse y al que hacerle<br />

cosas indescriptibles. Se me encoge el corazón y me duele. Esa es la verdad.<br />

—Ha venido a follarme, eso es todo.<br />

—¿Quién dijo que el romanticismo había muerto? —murmura horrorizada.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!