28.01.2016 Views

50sombras 168

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

así. Para ser una joven tan guapa, ingeniosa e inteligente, tienes verdaderos<br />

problemas de autoestima y me estoy pensando muy seriamente concertarte una<br />

cita con el doctor Flynn.Siento haberte asustado. La idea de haberte inspirado<br />

miedo me resulta horrenda. ¿De verdad crees que te dejaría viajar como una presa?<br />

Te he ofrecido mi jet privado, por el amor de Dios. Sí, era una broma, y muy mala,<br />

por lo visto. No obstante, la verdad es que imaginarte atada y amordazada me<br />

pone (esto no es broma: es cierto). Puedo prescindir del cajón; los cajones no me<br />

atraen. Sé que no te agrada la idea de que te amordace; ya lo hemos hablado:<br />

cuando lo haga —si lo hago—, ya lo hablaremos. Lo que parece que no te queda<br />

claro es que, en una relación amo/sumiso, es el sumiso el que tiene todo el poder.<br />

Tú, en este caso. Te lo voy a repetir: eres tú la que tiene todo el poder. No yo. En la<br />

casita del embarcadero te negaste. Yo no puedo tocarte si tú te niegas; por eso<br />

debemos tener un contrato, para que decidas qué quieres hacer y qué no. Si<br />

probamos algo y no te gusta, podemos revisar el contrato. Depende de ti, no de mí.<br />

Y si no quieres que te ate, te amordace y te meta en un cajón, jamás sucederá.Yo<br />

quiero compartir mi estilo de vida contigo. Nunca he deseado nada tanto.<br />

Francamente, me admira que una joven tan inocente como tú esté dispuesta a<br />

probar. Eso me dice más de ti de lo que te puedas imaginar. No acabas de<br />

entender, pese a que te lo he dicho en innumerables ocasiones, que tú también me<br />

tienes hechizado. No quiero perderte. Me angustia que hayas cogido un avión y<br />

vayas a estar a casi cinco mil kilómetros de mí varios días porque no puedes<br />

pensar con claridad cuando me tienes cerca. A mí me pasa lo mismo, Anastasia.<br />

Pierdo la razón cuando estamos juntos; así de intenso es lo que siento por<br />

ti.Entiendo tu inquietud. He intentado mantenerme alejado de ti; sabía que no<br />

tenías experiencia —aunque jamás te habría perseguido de haber sabido lo<br />

inocente que eras—, y aun así me desarmas por completo como nadie lo ha hecho<br />

antes. Tu correo, por ejemplo: lo he leído y releído un montón de veces, intentando<br />

comprender tu punto de vista. Tres meses me parece una cantidad arbitraria de<br />

tiempo. ¿Qué te parece seis meses, un año? ¿Cuánto tiempo quieres? ¿Cuánto<br />

necesitas para sentirte cómoda? Dime.Comprendo que esto es un acto de fe<br />

inmenso para ti. Debo ganarme tu confianza, pero, por la misma razón, tú debes<br />

comunicarte conmigo si no lo hago. Pareces fuerte e independiente, pero luego leo<br />

lo que has escrito y veo otro lado tuyo. Debemos orientarnos el uno al otro,<br />

Anastasia, y solo tú puedes darme pistas. Tienes que ser sincera conmigo y los dos<br />

debemos encontrar un modo de que nuestro acuerdo funcione.Te preocupa no ser<br />

dócil. Bueno, quizá sea cierto. Dicho esto, debo reconocer que solo adoptas la<br />

conducta propia de una sumisa en el cuarto de juegos. Parece que ese es el único<br />

sitio en el que me dejas ejercer verdadero control sobre ti y el único en el que haces<br />

lo que te digo. «Ejemplar» es el calificativo que se me ocurre. Y yo jamás te llenaría<br />

de moratones. Me va más el rosa. Fuera del cuarto de juegos, me gusta que me

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!