EDUCACION - bibliotecas morelos
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OCTAVI FULLAr<br />
Coombs(') señala cinco factores para explicar la presente crisis de la<br />
educación en el hemisferio norte de nuestro planeta, aunque con mayor incidencia<br />
en el ámbito occidental Se deja notar una muy fuerte demanda de<br />
instrucción en todos los dominios del saber y en sus diversos grados. No<br />
existe pueblecito que no acuse interés por la enseñanza. Las gentes han ido<br />
t omando conciencia de su necesidad y de su derecho a saber cosas. En España,<br />
la publicación del Libro Blanco sobre la Educación (2) actuó a modo<br />
de detonador, iniciándose a partir de él, y de la propaganda que le acompaño,<br />
una concienciación bastante generalizada tanto de la importancia de la<br />
escuela como del derecho que todos tienen a ella. Tales aspiraciones humanas<br />
subieron de punto a causa también de la explosión demográfica. El acusado<br />
aumento de candidatos a la enseñanza se deja notar en no importa<br />
que sistema docente. No parece, por otra parte, que este factor del crecimiento<br />
de alumnos tienda a disminuir de momento.<br />
Otro factor de la crisis reside en la penuria de medios' para hacer frente<br />
a la anterior invasión.- Desde 1950 no paran de aumentar, en el hemisferio<br />
norte de nuestra tierra, los medios que se ponen al servicio de la enseñanza.<br />
Ni lo realizado en el terreno de la formación de profesores, no obstante, ni<br />
las construcciones escolares, ni el nuevo material didáctico, incluidos manuales,<br />
ni las bolsas y becas de estudio..., responden de hecho a la demanda<br />
existente El desnivel constatado entre recursos y necesidades no sólo es notable,<br />
mas también tiende a acentuarse.<br />
El crecimiento del coste de la enseñanza por alumno constituye un tercer<br />
factor de la crisis educacional. La inflación monetaria provoca notables<br />
sacudidas en los presupuestos escolares. Dado que la actividad docente prosigue<br />
siendo fundamentalmente artesana, en contraste con lo acaecido en<br />
otras industrias, resultan muy elevadas las necesidades en personal, con lo<br />
cual, al intentar mejorar la enseñanza, se disparan los presupuestos económicos.<br />
Un factor de pasmo, y que agrava indiscutiblemente la crisis, Ig-tenemos<br />
en la inadecuación constatable entre lo que las sociedades están pidiendo<br />
,al proceso docente v lo que éste, de hecho, les entrega. Las sociedades mudan<br />
costantemente y los alumnos preparados en las escuelas y otros centros<br />
no acostumbran a hallarse a la altura de su tiempo. El paro de gente diplomacia<br />
es un síntoma de este desconcierto.<br />
El último factor de la crisis educacional que padecemos lo constituye,<br />
segun Coombs, la ineficacia con que están reaccionando los diversos sistemas<br />
ele enseñanza ante las dificultades enumeradas. Se prosigue con los mismos<br />
sistemas administrativos que antes, no se modifican seriamente ni los<br />
piugiamas académicos ni los métodos de enseñanza, la formación del profesonulo<br />
continúa siendo básicamente la tradicional.<br />
C111vus. Philin )I La cnse niondiale de l education , PUF, Paras, 1968.<br />
La uturac,Gn en ffsemia. Bases para una Política educativa , Ministerio de Educa-<br />
Ciencia.\tadnd, 1969.<br />
FILOSOFIAS DE LA EDUCACIÓN 9<br />
Los insoslayables datos educacionales están situados, pues, a nuestra<br />
vista en su desnuda confictividad. La U.N.E.S.C.O. tomó conciencia en su<br />
día de tal desespero y a principios de 1971 se creó una Comisión Internacio.<br />
nal, bajo la presidencia del francés Edgar Faure, para que estudiara los<br />
problemas de la educación y formulara recomendaciones. Como mínimo quedaba<br />
en sus puras carnes el reconocimiento de que las cosas educativas andaban<br />
mal. La realidad había dejado ya de ser tolerable. El resctado del<br />
trabajo de la Comisión fue el libro Apprendre á étre (I). Los análisis llevados<br />
a cabo de este documento han sido muy distintos según los haya fabricado<br />
un marxista soviéticamente ortodoxo, o un libertario, o un iberal, o<br />
un tecnólogo... No nos interesa en este punto la perspectiva, o ideología,<br />
desde la cual se realiza la lectura de Aprender a ser, nos basta, de momento,<br />
descubrir en el texto patrocinado por ja Ñ. E.S C_OR un desvelarniento del<br />
hecho educativo, entendido como hecho eñ crisis indiscutible, sin entrar ni<br />
en la etiología del morbo ni en su posible terapia. En la primera parte se<br />
formula un diagnóstico de la situación. He aquí algunos achaques: hay desarmonía<br />
entre las necesidades educacionales -objetivas-- de una sociedad<br />
y la demanda que formulan en concreto los ciudadanos -padres, alumnos<br />
y otros-. El proceso educativo es específicamente ambiguo, siendo a la vez<br />
producto y factor de la sociedad en la cual se produce. El medio socioeconómico<br />
y las estructuras y modos de la acción educativa se hallan en estrecha<br />
interrelación. La constante ambigüedad del proceso educativo cobra<br />
cierto dramatismo en la encrucijada presente. Lo propio sucede con la doble<br />
función del hecho educacional: su función reproductora y su función crítica,<br />
fuertemente relacionadas con la anterior ambigüedad. La educación es un<br />
subsistema de la sociedad, reflejando necesariamente sus estructuras más<br />
típicas; al mismo tiempo, sin embargo, puede ejercer una acción crítica de<br />
la sociedad. Esta antinomia perenne adquiere particular fuerza en nuestros<br />
tiempos.<br />
Apprendre á étre, marginando la ideología preponderante que lo vertebra<br />
y que lo hace discutible para muchos, sirve para enseñarnos que la educación<br />
constituye un indispensable analizador de las contradicciones que<br />
padecen las sociedades modernas. Cada hecho educativo se conviene en un<br />
significante que apunta al significado social correspondiente. He aquí la<br />
principal lección del documento.<br />
Valiéndonos de un par de obras acabamos de ponernos de alguna forma<br />
en contacto con el ámbito de los actuales hechos educativos.<br />
Parece como si al leer un texto sobre educación, o bien al colocuiar con<br />
otros en torno a sucesos educacionales, supiéramos de inmediato de qué<br />
estamos hablando o bien qué estamos leyendo. Y esto constituye un peligroso<br />
engaño. Ni la palabra «educación» ni multitud de otras ecparenta-<br />
(') APprendre a étre. Ed . UNESCO-Fayard. Paras. 1972. Hay traducción -stellana:<br />
Aprender a ser, Alianza Editorial y UNESCO. Madrid, 1973.