Informe del CG - IFAD

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En 1988 se concluyó el Segundo Proyecto de Desarrollo Rural de Maradi, por un monto total
de USD 47,5 millones, en el que el FIDA participó aportando el 25% de la financiación. Desde esa
fecha, la provincia de Maradi ha pasado a ser la más segura desde el punto de vista de su capacidad
productiva. Los agricultores, gracias a un enfoque muy apropiado del proyecto, son hoy en día
verdaderos ciudadanos y conocen las técnicas de ordenación de las tierras.
En 1992, el Níger puso en marcha el Proyecto de Desarrollo Rural de Aguié, en el que
también colaboró el FIDA con un préstamo de DEG 8 250 000. Este proyecto, que tiene en cuenta
todos los aspectos del desarrollo socioeconómico del medio rural, se está convirtiendo en un modelo
envidiado incluso fuera de nuestras fronteras.
En 1995, por desgracia, se produjo una suspensión de las actividades del FIDA en nuestro
país de la que fue responsable el Níger como consecuencia de sus enormes dificultades de tesorería,
que no permitieron respetar el ritmo de los pagos de nuestros atrasos en el reembolso del préstamo.
Esa ruptura de dos años ha entrañado un lucro cesante de DEG 2 864 076 en relación con la primera
fase del Programa Especial a Nivel Nacional y una interrupción de las actividades del Proyecto de
Desarrollo Rural de Aguié durante dos años.
Afortunadamente, entre asociados que comparten el mismo interés, a saber, el desarrollo de
la agricultura en beneficio de las poblaciones desfavorecidas, pueden resolverse todos los problemas.
De esta forma, y gracias a los esfuerzos desplegados por el FIDA, los atrasos han sido reescalonados,
lo que ha permitido levantar la suspensión que afectaba con tanta dureza al Níger.
En la actualidad, nos felicitamos por la reanudación de las actividades del Proyecto de
Desarrollo Rural de Aguié y por la firma del acuerdo de préstamo relativo al Programa Especial a
Nivel Nacional - Fase II. Es preciso agradecer a las más altas autoridades del FIDA todo lo que están
haciendo para comprender ciertas situaciones.
A ese respecto, el Níger, por mi intermedio, agradece vivamente a las altas autoridades del
FIDA que hayan autorizado el reescalonamiento de los atrasos del Níger y permitido desbloquear los
proyectos afectados.
Señor Presidente,
Señoras y señores:
El Níger ha optado por lograr un desarrollo sostenible mediante la promoción de la
agricultura; desde esa óptica, la política de gestión óptima de los recursos naturales y la lucha contra
la desertificación son dos pilares esenciales de nuestra política.
Para mi país, los programas y proyectos financiados por el FIDA en beneficio de las
poblaciones más desfavorecidas son una prueba de éxito, pues están plenamente en consonancia con
las prioridades del Gobierno del Níger.
Sé que nosotros, los Gobernadores por los países en desarrollo, debemos desempeñar un
importante papel para que las resoluciones aprobadas durante nuestras reuniones se apliquen de
forma satisfactoria; no obstante, y pese a nuestra mejor voluntad, con demasiada frecuencia nos
enfrentamos a situaciones que pueden llevarnos a la parálisis, es decir, a una imposibilidad de acción.
Aun así, asumimos el compromiso de hacer todo lo posible para llevar a efecto las decisiones
adoptadas, en interés de nuestras respectivas poblaciones.