Informe del CG - IFAD

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C. Estrategia de movilización de recursos
42. En el marco de la estrategia institucional recientemente adoptada, el enfoque del FIDA en
cuanto a la movilización de recursos parte de una definición más amplia del concepto "recursos", que
abarca no sólo los recursos financieros sino que engloba también los conocimientos, los recursos
intelectuales, las asociaciones de esfuerzos y el apoyo mutuo. Una estrategia así concebida supone
combinar y optimizar los esfuerzos dirigidos a la movilización de recursos financieros con los
encaminados a la creación de asociaciones de esfuerzos y al intercambio de conocimientos. A este
propósito, se han previsto una serie de procesos que se refuerzan recíprocamente: a) la movilización de
recursos financieros adicionales como parte de las actividades ordinarias y especiales del FIDA; b) el
establecimiento de alianzas estratégicas con organismos multilaterales e instituciones de la sociedad
civil; c) la promoción y facilitación del acopio de conocimientos e información, con especial énfasis en
las ONG, las instituciones de la sociedad civil y el público en general; y por último d) el
aprovechamiento de los recursos del sector privado en apoyo de las actividades de lucha contra la
pobreza en esferas tradicionalmente descuidadas por las modalidades comerciales de operación. Se
complementarán estos elementos de la estrategia del FIDA en materia de recursos mediante la
recolección y análisis sistemáticos de información sobre el contexto en que se desenvuelve la ayuda para
el desarrollo, particularmente en lo que atañe a las posibilidades, tendencias y prioridades de la
facilitación de fondos. La información así reunida respaldará la política operacional del FIDA y
contribuirá a la elaboración de un "enfoque de programa" que proporcione orientación a largo plazo a
las actividades del Fondo.
43. Necesidades de recursos y reposición de éstos. En vista de la pasada experiencia y como
resultado de la nueva estructura del régimen de gobierno, es obvio que el proceso de reposición de los
recursos del FIDA necesita ser reexaminado. Es menester estudiar el establecimiento de un proceso más
rápido y fiable. Ello debe hacerse teniendo en cuenta al mismo tiempo el impacto de los cambios de
política refrendados por el Consejo de Gobernadores, particularmente en lo concerniente a las nuevas
directrices sobre inversiones y al programa de labores. En el curso de 1998, la Administración se
propone desarrollar una serie de opciones, a los efectos de su examen y adopción, trabajando en estrecha
consulta con los Estados Miembros.
44. Fondos suplementarios. La movilización de estas contribuciones extra tiene por objeto
aumentar el volumen de los recursos ordinarios del Fondo. En 1998, se desplegarán esfuerzos no sólo
para ampliar y diversificar la corriente de fondos suplementarios sino también para mejorar la eficiencia
de su administración. Se elaborará un marco estratégico para la movilización de esos recursos y se
celebrarán consultas con los donantes potenciales. Se negociarán acuerdos para la recepción de
contribuciones de amplia base y la constitución de fondos fiduciarios, con arreglo a las prioridades
compartidas por el Fondo y los donantes interesados. Se fortalecerán el diálogo y las asociaciones de
esfuerzos actualmente en curso con los donantes de fondos suplementarios y se facilitará la utilización
de dichos fondos mediante la adopción de modalidades más flexibles y la preparación de un manual en
línea en el que se definirán las condiciones para su empleo. Se publicará asimismo un folleto relativo a
la facilitación y el uso de los fondos suplementarios con destino a los donantes actuales y potenciales.
45. Fomento de los recursos no provenientes de los Estados Miembros. Se adoptarán medidas para
optimizar la cuantía y la gestión de los recursos no provenientes de los Estados Miembros. Se ha
previsto, en particular: a) la diversificación de la cartera de inversiones del Fondo a efectos de
acrecentar su rentabilidad con sujeción a cuidadosos parámetros de control de riesgos; b) un uso
prudente de la facultad para contraer compromisos anticipados a efectos de formalizar compromisos con
cargo a los reflujos futuros de los préstamos, dentro de cada período de reposición; y c) la adopción de
iniciativas para abordar la cuestión de los atrasos en los pagos, incluida la participación del Fondo sobre