Edición Digital - Fundación Luis Chiozza
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182 Lu i s <strong>Chiozza</strong><br />
“perceptiva” de un antígeno contrastándolo con lo que se conserva<br />
en la memoria inmunitaria.<br />
Debemos por fin, antes de abandonar el tema de la evolución<br />
del pensamiento, considerar otra cuestión. El verbo “pensar” –en<br />
su modo infinitivo, funcionando como un nombre sustantivo– designa<br />
una actividad que produce pensamientos. Los pensamientos<br />
pueden ser imágenes, representaciones, reflexiones, especulaciones<br />
o razonamientos, pero de acuerdo con el desarrollo que hemos resumido,<br />
el pensamiento, en su forma más lograda, es el producto<br />
de un proceso que establece identidades a partir de diferencias. Los<br />
pensamientos, como productos del pensar, constituyen lo pensado;<br />
y la cuestión que alcanza una importancia extrema y que queremos<br />
presentar ahora es que, frente a lo pensado, surgen dos actitudes<br />
que atrajeron la atención de Bion, el insigne psicoanalista inglés. Es<br />
posible volver a pensar lo ya pensado o, también, utilizarlo sin más<br />
como una certidumbre que nos exime de ulteriores elaboraciones. Es<br />
necesario reconocer, ante todo, que la inmensa mayoría de los pensamientos<br />
que pueblan nuestro ánimo y rigen nuestra vida, y que la<br />
memoria conserva en los meandros inconscientes, funcionan como<br />
pensamientos pre-pensados, como pre-juicios que, bajo la forma de<br />
automatismos habituales, posibilitan –cuando funcionan bien–, que<br />
la enorme complejidad de la vida proceda inconscientemente sin<br />
mayores tropiezos. La inmensa mayoría, decíamos. Pero, también es<br />
necesario tener en cuenta que, así como nuestro ADN se diferencia<br />
en un mínimo porcentaje del ADN que pertenece al chimpancé y<br />
sin embargo esa pequeña diferencia “cuenta” como una gran significancia,<br />
tal vez la quintaesencia de nuestra condición humana resida<br />
en la capacidad de “volver a pensar” algunos de nuestros pensamientos<br />
pre-pensados cuando “sentimos” que funcionan mal.<br />
La evolución del sentimiento<br />
Freud sostenía que la conciencia percibe como sentimientos, a<br />
las últimas manifestaciones de una descarga afectiva. La neurología