17.05.2013 Views

Edición Digital - Fundación Luis Chiozza

Edición Digital - Fundación Luis Chiozza

Edición Digital - Fundación Luis Chiozza

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

¿Po r q u é n o s e q u i v o C a m o s? 49<br />

parte observadora no puede incluirse al mismo tiempo en lo que<br />

está observando.<br />

Si volvemos ahora sobre nuestro primitivo asunto, podemos<br />

preguntarnos: ¿dónde “quedo” yo, entonces? No soy mi cuerpo<br />

cuando me quejo de él. Tampoco mi cerebro cuando siento que no<br />

me ayuda a recordar. A veces, cuando hablo de mí, señalo hacia el<br />

centro de mi pecho, tal vez en el lugar que en mis primeros años<br />

ocupaba mi timo, pero ¿resido allí? ¿Resido en la zona que guarda<br />

mis mapas o en alguna otra zona que los lee? Tal vez, podría decirse<br />

que yo resido en mis ácidos nucleicos; sin embargo, es claro<br />

que, si usando el pronombre posesivo “mis”, estoy hablando de<br />

ellos, es porque mis ácidos nucleicos en ese momento no son yo.<br />

¿Podría ser yo la persona que los otros “ven”? Pero, cuando me ven<br />

y me oyen con ojos y oídos que funcionan regidos por criterios<br />

que no son los míos, ¿dónde radican mis límites? Cuando pienso<br />

en un “yo” que se acerca a lo que se considera mi persona, siempre<br />

se trata de una provisoria convención trazada entre el consenso de<br />

los otros y yo. Ese soy, entonces, usando el archivo de mis mapas,<br />

yo: un convenio provisorio que puede sentirse sustituido y anulado<br />

cuando alguien que forma una parte importante del entorno<br />

amenaza con cambiar su aprecio.<br />

Llego entonces a la conclusión, “por lo que veo”, de que mi yo<br />

“fluctúa”, se extiende, cambia de forma y se contrae; como el cuerpo<br />

o el seudopodio de una ameba. Es un nudo de una red compleja,<br />

autopoyética, variable e inconmensurable; un nudo dentro del cual<br />

circulan las ideas de un imaginario colectivo que, como señala Bateson,<br />

hoy son yo y mañana pueden ser usted. En esa fluctuación se<br />

pueden, me parece, reconocer dos extremos, porque a veces siento<br />

en un extremo que yo soy el único destinatario del apodo cariñoso<br />

que sólo mi madre utilizaba, y otras, me veo en el otro extremo,<br />

orillando un abismo, como una gota de agua que pretende afirmar,<br />

de un modo inexorablemente pre-potente, su particular existencia<br />

entre las otras, frente a la inmensidad del mar.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!