08.05.2013 Views

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>El</strong> <strong><strong>don</strong>c<strong>el</strong></strong> ... – 127 – Capítulo XI<br />

encontrar con estas ropas había visto pasar a unos armados<br />

con un cadáver <strong>de</strong> una mujer, a su parecer hermosa y joven;<br />

mi esposa, señor. Rec<strong>el</strong>áronse <strong>de</strong> él y quisieron echarle mano<br />

para impedir que su mal hecho se supiese; mas <strong>el</strong> conocimiento<br />

que tiene <strong>de</strong>l país, las quebradas <strong>de</strong> las peñas y sus<br />

buenos pies le salvaron, por <strong>de</strong>sdicha mía, para mi amargo<br />

<strong>de</strong>sengaño.<br />

—Pastor, llegad —dijo <strong>don</strong> <strong>Enrique</strong>—; ¿vos habéis visto<br />

eso?<br />

—Verdad dice su gran<strong>de</strong>za —repuso <strong>el</strong> pastor con visible<br />

turbación, que achacaron todos al asombro <strong>de</strong> hallarse en<br />

tal paraje—. Llevábanla, sin duda, a enterrar en los sitios<br />

ocultos en <strong>don</strong><strong>de</strong> los vi.<br />

—Justicia; pues, señor, justicia. Otorgadme que me dé<br />

a buscar al alevoso, y que <strong>don</strong><strong>de</strong> quiera que le encuentre,<br />

pueda, sin du<strong>el</strong>o ni formalidad alguna, castigar al que como<br />

villano se portó.<br />

—Yo os juro, <strong>don</strong> <strong>Enrique</strong>, justicia y reparación. Alzad;<br />

¿tenéis vos indicios <strong>de</strong> quién pueda ser <strong>el</strong> robador?<br />

—Ninguno —respondió Villena levantándose.<br />

—¿Sospecháis, por ventura, si una venganza o si una<br />

pasión...?<br />

—¡Ay <strong>de</strong> quien osare ofen<strong>de</strong>r la memoria <strong>de</strong> mi esposa!...<br />

—Nadie en mi presencia la ofen<strong>de</strong>rá, con<strong>de</strong> <strong>de</strong> Cangas<br />

y Tineo. Imposible me fuera conce<strong>de</strong>ros que os entreguéis<br />

a buscar al <strong>de</strong>lincuente; necesito vuestra asistencia en mi<br />

corte. Pero los oficiales <strong>de</strong> mi justicia apurarán la verdad<br />

y le hallarán <strong>don</strong><strong>de</strong> quiera que se esconda. Os otorgo, sin<br />

embargo, en nombre <strong>de</strong> Dios trino y uno, a quien en la tierra<br />

representan los reyes ejercitando su justicia, que matéis al<br />

villano, si lo halláis, <strong>don</strong><strong>de</strong> quiera que lo halléis, armado o<br />

<strong>de</strong>snudo, solo o acompañado, por vuestra mano o por la <strong>de</strong>

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!