08.05.2013 Views

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>El</strong> <strong><strong>don</strong>c<strong>el</strong></strong> ... – 325 – Capítulo XXXII<br />

servía a los <strong>de</strong>más, o no los servía, una robusta Maritornes,<br />

que nada tenía que envidiar a la <strong>de</strong> Cervantes si no es la pluma<br />

<strong>de</strong> su historiador y cronista. En segundo lugar quitábase<br />

la montera cada vez que aquél le dirigía la palabra, lo cual<br />

hacía éste siempre, preciso es <strong>de</strong>cirlo todo, con aire imperioso<br />

y hablando como superior a inferior. En tercer lugar reíase a<br />

la menor palabra que <strong>de</strong>cía <strong>el</strong> forastero. Y en cuarto le había<br />

sacado <strong>de</strong> las provisiones reservadas <strong>de</strong> su host<strong>el</strong>ería unas<br />

aceitunas algo aventajadas, y cierto vino, no precisamente<br />

puro, pero en fin, <strong>de</strong>l que tenía menos agua en su bo<strong>de</strong>ga.<br />

<strong>El</strong> forastero cenaba más bien como un gañán que como<br />

un señor; pero, fuera <strong>de</strong> esto, era preciso confesar que entre<br />

todos los que formaban aqu<strong>el</strong>la escogida reunión no había<br />

nadie que tuviese un exterior tan cortesano, ni que más se<br />

apartase <strong>de</strong>l tipo primordial <strong>de</strong>l hombre <strong>de</strong> la Naturaleza,<br />

al cual estaban <strong>de</strong>masiado cerca, en honor <strong>de</strong> la verdad,<br />

aqu<strong>el</strong>los sencillos arjonillanos. De todo <strong>el</strong> comportamiento<br />

<strong>de</strong>l huésped para con <strong>el</strong> forastero no era preciso ser un lince<br />

para inferir que éste era hombre que disponía <strong>de</strong> más que<br />

<strong>de</strong> medianas faculta<strong>de</strong>s, y que aquél se prometía una lucida<br />

paga <strong>de</strong> sus esmeradas y particulares atenciones.<br />

—Traedme más vino —dijo <strong>el</strong> forastero apurando la primera<br />

vasija que a su <strong>de</strong>recha había puesto <strong>el</strong> posa<strong>de</strong>ro.<br />

—Como gustéis —dijo éste riéndose, y no tardó un minuto<br />

en estar servido <strong>el</strong> huésped—. No se bebe mejor, señor<br />

caballero —dijo aquél—, en toda la tierra.<br />

—<strong>El</strong> pan es <strong>el</strong> que es malo —dijo <strong>el</strong> viajero.<br />

—¡Ah, sí, señor, como gustéis, muy malo! —repuso riéndose<br />

obsequiosamente <strong>el</strong> host<strong>el</strong>ero—. ¡Ya veis —añadió acercándose<br />

al oído—. Esta semana no se ha cocido en casa todavía,<br />

y ha cargado tanta gente que he tenido que recurrir a un<br />

vecino...

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!