08.05.2013 Views

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

El doncel de don Enrique el Doliente - Djelibeibi

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>El</strong> <strong><strong>don</strong>c<strong>el</strong></strong> ... – 355 – Capítulo XXXV<br />

<strong>de</strong>ben esta acogida, porque <strong>el</strong> castillo a que han llamado no<br />

es en realidad <strong>de</strong> los más hospitalarios que pudieran haber<br />

encontrado en su camino.<br />

—Pax vobiscum —dijo <strong>el</strong> menos corpulento <strong>de</strong> los padres<br />

con voz grave.<br />

—Como gustéis, padres —repuso Ferrus—, según <strong>el</strong> estribillo<br />

<strong>de</strong> mi huésped <strong>de</strong> ayer; porque han <strong>de</strong> saber sus reverencias<br />

que <strong>de</strong> dos dignos alcai<strong>de</strong>s que tienen en su presencia<br />

ahora, ninguno sabe latín.<br />

—En ese caso, Te Deum laudamus —repuso <strong>el</strong> padre, respirando<br />

como aqu<strong>el</strong> a quien le quitasen <strong>de</strong> encima una montaña.<br />

—Gracias —contestó <strong>de</strong> nuevo Ferrus, no queriendo ser<br />

tachado <strong>de</strong> poco político por <strong>de</strong>jar sin respuesta una lengua<br />

que no entendía—. Dos cosas <strong>de</strong>bemos suplicar a vuestras<br />

reverencias —prosiguió; primera, que se quiten esos hábitos<br />

que traen mojados...<br />

—Et super flumina Babylonis, dice <strong>el</strong> salmista; vetat regula,<br />

la regla nos lo impi<strong>de</strong>.<br />

—Sea en buen hora; pero la regla no impedirá a vuestras<br />

reverencias que hagan lo que vieren a<strong>don</strong><strong>de</strong> quiera que fueren;<br />

primera regla <strong>de</strong> hospitalidad entre caballeros —añadió<br />

Ferrus <strong>de</strong>rramando vino nuevamente en las copas y ofreciendo<br />

una al padre que había llevado hasta entonces la palabra.<br />

Miráronse los padres uno a otro para consultar entre sí lo<br />

que <strong>de</strong>berían hacer.<br />

—¡Voto va! aquí se ofrece <strong>de</strong> buena voluntad —añadió<br />

Ferrus viendo su in<strong>de</strong>cisión—, ¿no es cierto, señor camarero?<br />

—Vos lo habéis dicho —repuso <strong>el</strong> camarero tomando una<br />

copa—. Pero si sus reverencias no se atreven por respetos al,<br />

ci<strong>el</strong>o, nosotros, viles gusanos <strong>de</strong> la tierra...

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!