22.07.2013 Views

BIOETICA Y PSIQUIATRIA

BIOETICA Y PSIQUIATRIA

BIOETICA Y PSIQUIATRIA

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

BIOÉTICA Y PSIQUIATRÍA. LOURDES MENDIBURU.<br />

En el contexto de tratamiento de un paciente con un trastorno mental diagnosticado, la<br />

relación exige similares condiciones a las que se establecen en cualquier otro tipo de<br />

indicación terapéutica: la prudencia en la génesis de expectativas de resultados, el respeto a la<br />

libertad y autonomía del enfermo, la evitación de la explotación económica (manteniendo el<br />

tratamiento dentro de límites razonables en cuanto a duración y con ponderación continuada<br />

de los aspectos evolutivos) y el respeto a los límites de la relación interpersonal (se acepta<br />

como éticamente reprobable la intimidad personal durante el tratamiento por su evidente<br />

interferencia en el resultado del mismo).<br />

La formación y la indicación<br />

La formación profesional del terapeuta es un tema debatido y a veces espinoso que<br />

plantea multitud de cuestiones: ¿basta la titulación de psicólogo clínico o de psiquiatra para<br />

estar capacitado para “hacer psicoterapia”? ¿cualquier tipo de psicoterapia? ¿puede indicar<br />

una psicoterapia quien no conoce otra alternativa terapéutica para el trastorno que se pretende<br />

tratar? ¿quién establece el tipo de psicoterapia idónea para un paciente y un trastorno<br />

concreto? ¿cómo se establece la coexistencia de la psicoterapia con otros tratamientos?.<br />

Parece que en el campo de la psicoterapia se han deslizado ciertos mitos sobre la eficacia a<br />

partir de la buena relación, empatía o perspicacia natural del psicoterapeuta, en detrimento de<br />

la técnica y la formación sólida en un modelo o campo de aplicación específica.<br />

En algunos casos se actúa con cierta ligereza, rayana en la maleficencia (o incluso en la<br />

imprudencia temeraria), tanto por carecer de una formación inicial suficiente y acreditada,<br />

tanto por no preocuparse por tener una formación continuada y constante.<br />

Respecto a la elección de la técnica a aplicar, parece probado que determinadas escuelas<br />

o técnicas son más efectivas que otras para tratar determinados síntomas o patologías. De ahí,<br />

que, la correcta elección de la psicoterapia a realizar ha de estar ajustada a la clínica y<br />

necesidades y demandas del paciente y no meramente a las preferencias del profesional. Por<br />

ello es conveniente que el terapeuta –sobre todo en la sanidad pública- maneje con<br />

competencia el mayor número de enfoques posibles, haciendo así efectiva la atención a un<br />

mayor número de patologías.<br />

Podría existir un mal uso, que llevaría a rechazar la solicitud de atención en función de<br />

una supuesta “no-susceptibilidad” de tratamiento. En el otro extremo, también rechazable<br />

estaría la inducción de una demanda artificial que derivase en un tratamiento innecesario<br />

(suele ser más frecuente en la práctica privada).<br />

El principio de no-maleficencia exige, en este ámbito, que el paciente reciba el (o los)<br />

tratamientos, de entre los disponibles, más idóneos para el trastorno que padezca; que se le<br />

eviten tratamientos inútiles o perniciosos, que se le garantice una adecuada coordinación entre<br />

los distintos profesionales que intervienen en su caso, y que se establezcan las jerarquías y los<br />

tiempos de las diversas terapias aplicadas.<br />

La confidencialidad<br />

El deber de secreto y el derecho a la confidencialidad, que posee el paciente, tiene<br />

matices propios en la relación psicoterapéutica. En este modelo de tratamiento, el vínculo<br />

paciente-terapeuta presupone una confianza total y una especial y absoluta garantía de<br />

mantener el secreto de todo el material que se irá trabajando, muy vinculado a lo más intimo<br />

del paciente. Sin esta relación de confianza, la psicoterapia no “cura”.<br />

Por eso, el terapeuta debe ser extremadamente cuidadoso y delicado con la información.<br />

Si el terapeuta va a publicar en una revista científica, el caso, la evolución del tratamiento de<br />

su paciente, lo hará con permiso del paciente, mostrándole a éste el documento que va a<br />

50

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!