01.03.2015 Views

LA HERMANDAD DE LA BUENA SUERTE - Wikiblues.net

LA HERMANDAD DE LA BUENA SUERTE - Wikiblues.net

LA HERMANDAD DE LA BUENA SUERTE - Wikiblues.net

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

conmiseración, reprochándole tan indecoroso berrinche. Luego levantó la cabeza con<br />

los ojos cerrados y bostezó largamente, las fauces distendidas de par en par<br />

apuntando al cielo como si quisiera zamparse el sol.<br />

-¿Todos sanos y salvos? -indagó el Príncipe cuando se reunieron un poco más<br />

adelante, en un pequeño ensanchamiento del camino.<br />

-Yo me he quedado sin mis gafas -se quejó el despojado cegato.<br />

-No te preocupes -le tranquilizó el Profesor, con tono de burlesco melodrama-.<br />

De ahora en adelante, yo seré tu lazarillo...<br />

-¡Anda y que te den!<br />

El Comandante los interrumpió, de nuevo impaciente.<br />

-¡Venga, sigamos de una vez, que ya queda poco y la tarde se nos echa<br />

encima!<br />

De modo que continuaron cuesta arriba, por un terreno cada vez más fácil y<br />

accesible. Ya tenían a la vista, entre los árboles, el edificio de la villa, con sus terrazas<br />

y sus anchas escaleras de piedra. Cruzaron una zona un poco más boscosa y llegaron<br />

a un claro muy pedregoso. Allí, sentado en una roca de forma propicia cubierta de<br />

musgo, estaba un hombre fumando. Al verlos se levantó sin prisa, tiró el cigarrillo y<br />

lo aplastó cuidadosamente con el pie.<br />

-¡Hola! Os habéis hecho esperar bastante. Los leones estaban abajo, ¿eh?<br />

Era un tipo alto, muy fornido, completamente calvo. Llevaba gafas negras y<br />

una camisa ligera de manga corta, desabrochada hasta el esternón, que dejaba ver<br />

una abundante vegetación pectoral como compensación a su alopecia en la zona<br />

superior. Tenía una voz cultivada y agradable, casi dulce, aunque su sonrisa<br />

resultaba demasiado irónica para poder considerarla francamente amistosa.<br />

-Adelante, adelante... Me llamo Tizón y estoy aquí para darles la bienvenida.<br />

-¿Nos esperaba? -preguntó el Príncipe, sorprendido.<br />

-Pues sí, ya lo ve. Y también sé que van ustedes armados. ¡Me lo ha dicho un<br />

pajarito! Les ruego que saquen toda la artillería y la dejen en el suelo. Sin gestos<br />

bruscos, por favor, no pongan nerviosos a mis muchachos... -Hizo un gesto amplio<br />

con la mano derecha, abarcando generosamente el paisaje a su alrededor. Fue como<br />

si efectuara un pase de magia. Saliendo de tras los árboles a sus espaldas aparecieron<br />

otros cinco personajes, desplegados en semicírculo. Todos llevaban también gafas<br />

oscuras y esgrimían convincentes pistolas.<br />

Tres de los aventureros obedecieron la orden del llamado Tizón y depositaron<br />

con melindrosa reluctancia sus armas ante ellos. Todos menos el Comandante, que<br />

sencillamente se cruzó de brazos y comenzó a silbar muy ufano la sintonía de<br />

«Bonanza», como si no hubiera en su vida el menor motivo de preocupación. Tizón<br />

le miró con cierto fastidio y se limitó a comentar:<br />

140

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!