Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
frontación de experiencias y de compromisos con la joven generación,<br />
pero no quiere quela aventura termine en la constitución de un "refugio"<br />
ni en la formación de una secta, así fuese de pensamiento. Al rehusar<br />
instalarse como dirigente carismático o como maestro del pensamiento<br />
rodeado de discípulos, se protege y protege al grupo de estos peligros, a<br />
este grupo que se conocía con el vago y poco utilizado título de "grupo<br />
experímentalv.é Pese a que la vida del "primer círculo" fue efímera, el<br />
eco de esta proposición se encuentra, casi enunciado en los mismos términos,<br />
en la presentación de La invención de lo cotidiano, cuyos dos volúmenes<br />
escritos en colaboración han permitido "la pluralización de la<br />
investigación" y "el entrecruzamiento de muchos transeúntes", sin erigir<br />
un lugar propio ni amasar un tesoro alguno del cual habrían conservado<br />
la propiedad. Al contrario, "este entrecruzamiento de recorridos, muy<br />
lejos de constituir una barrera, prepara, espero, la posibilidad de que<br />
nuestros pasos se pierdan en la muchedumbre" (p. XXXV).<br />
El "primer círculo" funciona de junio de 1974hasta la primavera<br />
de 1975;sus actividades decrecen en silencio; se deshace sin librar siquiera<br />
una batalla. Los participantes, cada uno por su lado en los diferentes<br />
medios, trabajos y militancias, no supieron o no pudieron inventarse un<br />
lugar común de participación y de investigación; sus prácticas y sus intereses<br />
resultaban probablemente demasiado divergentes para ponerse de<br />
acuerdo sobre un proyecto. Tal vez sólo tenían en común'las impaciencias<br />
de su generación y su vínculo personal con Michel deCerteau,lo que<br />
era demasiado poco para que un grupo unido pudiese emerger, en la<br />
medida en que su promotor rechazaba ser la razón y el cemento. Tal vez<br />
la solicitud de de Certeau era en sí misma ambivalente y dejó que el círculo<br />
se deshiciera en la medida en que toma conciencia de esta ambivalencia<br />
(deseo hablar de la ambivalencia de su papel en el grupo que él<br />
propicia, pero respecto al cual rehúsa ser el polo de atracción y la razón<br />
de ser). En todo caso, luego de algunos meses, se hizo evidente que la<br />
inserción común en cualquier barrio había sido un sueno y así lo seguiría<br />
siendo. Otro factor de esta disolución silenciosa fue la importancia muy<br />
pronto adquirida por el "segundo círculo" y la vitalidad que de ahí surgió.<br />
Del "primer círculo" subsistieron vínculos de variada intensidad entre<br />
los miembros, una complicidad perdurable y esa insistencia puesta en<br />
la necesidad de referirse a casos concretos para hacer "su descripción o<br />
historiografía", fórmula muchas veces utilizada por de Certeau en los<br />
documentos internos del "primer círculo". Este "primer círculo" no fue<br />
inútil pues agrupó a gente que, con algunas raras excepciones, como el<br />
28 Más tarde, un estudiante brasileño que había frecuentado el seminario escribió en un<br />
folleto interno de la Universidad de París VII un maravilloso retrato del "maestro que no<br />
quería tener discípulos".<br />
XXVI