Descargar libro - Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau
Descargar libro - Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau
Descargar libro - Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
90<br />
muy gran<strong>de</strong> y una loma. Bajábamos esa loma y allí nos bañábamos,<br />
en <strong>la</strong> piedra esa […] Iban los ahijados que el<strong>la</strong> <strong>de</strong>cía que le hacía falta.<br />
Dice que era para ben<strong>de</strong>cir, porque <strong>de</strong>spués el<strong>la</strong> iba siempre con un<br />
cubo y el<strong>la</strong> salía, llenaba el cubo <strong>de</strong> agua <strong>de</strong> esa, antes <strong>de</strong> bañarnos,<br />
y <strong>la</strong> ponía el día 24 <strong>de</strong><strong>la</strong>nte <strong>de</strong> los santos en una pa<strong>la</strong>ngana […] Los<br />
ahijados que iban ahí, que iban a saludar, que iban a visitar y eso, se<br />
<strong>la</strong>vaban <strong>la</strong>s manos y <strong>la</strong> cara con eso, con esa agua, y <strong>de</strong>spués lo que<br />
quedaba era mandado a botar… 104<br />
En el período <strong>de</strong> apogeo <strong>de</strong> Elena Mestre, Valentín Alfonso daba sus<br />
primeros pasos en <strong>la</strong> religiosidad. Si bien él nunca fue ahijado <strong>de</strong> <strong>la</strong> gran<br />
caracolera, «siempre se consi<strong>de</strong>ró un “hijo <strong>de</strong> santo” <strong>de</strong> ahí, ya que esa<br />
era una casa mayor, pero santoralmente no tenía nada hecho ahí», nos<br />
cuenta Chelé. Esa casa era visitada por el baba<strong>la</strong>o habanero Ad<strong>de</strong>china,<br />
<strong>de</strong>l cual <strong>la</strong> madre <strong>de</strong> Chelé, Anastasia Arango, 105 llevó durante toda su<br />
vida un col<strong>la</strong>r <strong>de</strong> Ochún <strong>la</strong>vado por él y puesto en el barrio. Suena el<br />
nombre <strong>de</strong> otro africano en esta morada, Labordé, <strong>de</strong>l que nadie sabe<br />
exactamente el vínculo con <strong>la</strong> caracolera (¿padrino, ¿compañero).<br />
A pesar <strong>de</strong> que Elena Mestre disponía <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s conocimientos<br />
y po<strong>de</strong>res, y que había iniciado a varias personas en Sagua, no era<br />
reconocida como santera. Algunos <strong>de</strong> sus ahijados fueron a La Habana a<br />
rehacer el santo, sobre todo aquellos que siguieron <strong>la</strong> carrera santoral, es<br />
<strong>de</strong>cir, que crearon su propia familia religiosa. A causa <strong>de</strong> este «segundo<br />
asiento» a veces se escucha <strong>de</strong>cir en Sagua «fu<strong>la</strong>nito hizo santo dos<br />
veces». Pero, ¿era una repetición <strong>de</strong> lo anterior o se trataba más bien<br />
<strong>de</strong> algo nuevo Hay varias hipótesis, <strong>la</strong> <strong>de</strong> Agustina que afirma que<br />
Agustina. Dato por <strong>de</strong>más significativo, ya que los recibió <strong>de</strong> manos <strong>de</strong> su<br />
madrina y hoy en día muchos afirman que sólo el sacerdote <strong>de</strong> Ifá conoce el<br />
secreto y está facultado para montar Osun. En <strong>la</strong> actualidad este es uno <strong>de</strong><br />
los temas <strong>de</strong> mayor <strong>de</strong>sacuerdo entre baba<strong>la</strong>os y santeros.<br />
104<br />
Esteban Montejo, en sus años transcurridos en <strong>la</strong> zona norte <strong>de</strong> Las Vil<strong>la</strong>s,<br />
comenta con énfasis <strong>la</strong> fiesta <strong>de</strong>l 24 <strong>de</strong> junio, hecho que tiene puntos en común<br />
con <strong>la</strong> ceremonia realizada por Elena Mestre con sus ahijados: «El día <strong>de</strong><br />
San Juan todo el mundo iba a bañarse al río. El que no lo hacía se llenaba<br />
<strong>de</strong> bichos enseguida. Si había alguien que no podía ir al río, como una<br />
vieja o un niño muy chiquito, se metía en una batea. Una batea no era lo<br />
mismo que un río, pero tenía agua y esa era <strong>la</strong> cuestión. Mientras más agua<br />
se echara uno por arriba, más <strong>de</strong>spojado salía.» (Barnet, 2001: 68-69)<br />
105<br />
Anastasia Arango hizo santo con Valentín Alfonso, su primo hermano, en<br />
1948.<br />
ComounaMemoria.indd 90<br />
09/10/2003, 08:51:44 p.m.