11.07.2015 Views

Pulsa aquí para seguir leyendo el libro en ... - La Web Cristiana

Pulsa aquí para seguir leyendo el libro en ... - La Web Cristiana

Pulsa aquí para seguir leyendo el libro en ... - La Web Cristiana

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

68¡Fantástico <strong>el</strong> amor de esos muchachos! ¡Tranquilo, Jesús! ¡Tú lúcete d<strong>el</strong>ante de toda la g<strong>en</strong>teque quieras, pero a los que nos fastidian, lo mejor es echarlos de una bu<strong>en</strong>a vez y que se vayan a gritara sus casas! ¿De donde habrá salido esta fastidiosa mujer? ¡Que g<strong>en</strong>te complicada que hay acá! ¡Nadaque ver con la iglesia!¿Te das cu<strong>en</strong>ta por qué luego, <strong>para</strong> satisfacer los requerimi<strong>en</strong>tos de personas que pi<strong>en</strong>san comoestos discípulos, la iglesia trocó su primaria alegría, bullicio y espontaneidad, por esa cosa triste,acartonada, solemne y estirada que muchos de nosotros hemos conocido?Me tocó predicar una vez <strong>en</strong> una congregación de g<strong>en</strong>te muy culta. Me recibieron muy bi<strong>en</strong> y <strong>en</strong>la r<strong>el</strong>ación persona a persona, se mostraban muy accesibles y, te podría decir…normales. Pero luego,durante la predicación, se los veía demasiado serios, tiesos y hasta cerrados.Luego me <strong>en</strong>teré que una de las peores of<strong>en</strong>sas que le podían hacer a su pastor, era sonreírsemi<strong>en</strong>tras él predicaba. Oye: no te estoy dici<strong>en</strong>do que no debían reírse a carcajadas por mejor que fuera<strong>el</strong> humor d<strong>el</strong> predicador y ni siquiera que se rieran con demasiado bullicio. ¡¡Te digo que t<strong>en</strong>ían prohibidosonreírse!! ¿Con que versión de Biblia se habrán formado?Ahora vamos a lo más práctico. Suponte que tú eres <strong>el</strong> pastor y que hay, d<strong>en</strong>tro de tucongregación, una mujer tan molesta por sus voces como apar<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te era esta. ¿Qué harás? ¿Ledirás a alguno de esos diáconos fornidos y duros que ti<strong>en</strong>es, que la retir<strong>en</strong> “pacíficam<strong>en</strong>te” d<strong>el</strong> templo?¿O harás lo que hizo Jesús?(24) Él respondi<strong>en</strong>do, dijo: No soy <strong>en</strong>viado sino a las ovejas perdidas de la casa de Isra<strong>el</strong>.Si hubiera estado allí un amigo mío que gusta de los dichos populares con métrica absurda,hubiera exclamado algo así como: ¿Y que ti<strong>en</strong>e que ver <strong>el</strong> coco con la limonada, Jesús? ¡No es eso loque te hemos preguntado!Algunas páginas antes, <strong>en</strong> este mismo evang<strong>el</strong>io de Juan, y unos cuantos días antes de estehecho, Jesús les dijo algo parecido a sus discípulos cuando los <strong>en</strong>vió de dos <strong>en</strong> dos a predicar lasBu<strong>en</strong>as Nuevas, ¿Recuerdas?En Mateo 10:5-6 tú puedes leer que les dice: Por camino de g<strong>en</strong>tiles no vayáis, y <strong>en</strong> ciudadde samaritanos no <strong>en</strong>tréis, sino id antes a las ovejas perdidas de la casa de Isra<strong>el</strong>. Esto quieredecir que <strong>el</strong> ministerio de Jesús, <strong>en</strong> principio, v<strong>en</strong>ía apuntado a la restauración de su propio pueblo. ¡Ynadie se atrevía a criticarlo por no dedicarse a la obra evang<strong>el</strong>ística de “ganar almas”. (Encomillo “ganaralmas” porque eso no está escrito <strong>en</strong> toda la Biblia. Ella nos demanda hacer discípulos.Sin embargo, las restricciones <strong>en</strong> su misión no implicaban, necesariam<strong>en</strong>te, ningún exclusivismoracial, sino que t<strong>en</strong>ían que ver más con sus limitaciones como personas y con las prioridades dispuestaspor <strong>el</strong> Padre.¿Cuáles serían esas prioridades, hoy? Pres<strong>en</strong>tar <strong>el</strong> evang<strong>el</strong>io, <strong>en</strong> primer término, a aqu<strong>el</strong>los quehan nacido <strong>en</strong> lugares con formación cristiana, que conoc<strong>en</strong> al Dios que va a predicarse, al Cristo que vaa pres<strong>en</strong>tarse y al Espíritu Santo que va a producir acción directa. Luego, si estos no aceptan o escubierto todo su espectro, podremos pasar a lugares más inhóspitos.Hermano… perdón… ¿Usted me está dici<strong>en</strong>do que debemos predicarle <strong>el</strong> evang<strong>el</strong>io <strong>en</strong> primerlugar, a g<strong>en</strong>te que ya conoce <strong>el</strong> evang<strong>el</strong>io? No. Lo que te digo es que debemos predicarle <strong>el</strong> evang<strong>el</strong>io ag<strong>en</strong>te que lo oye m<strong>en</strong>cionar todos los días, pero que aún no lo conoce. Y son muchos, créeme.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!