13.07.2015 Views

203 Dic - Scherzo

203 Dic - Scherzo

203 Dic - Scherzo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

D O S I E RVEINTE AÑOS DE MÚSICA EN ESPAÑArecio, penumbroso y una articulación y maneras que han depulirse. De todas formas, aun así, el cantante malagueño,siempre entregado y vigoroso, arrasa allá por donde va.Miguel Ángel Zapater era un bajo auténtico. Lástima que lasposibilidades de desarrollo que ofrecía su voz parezcan hoycerradas al haber perdido consistencia y colorido. Un bajo,muy lírico cuando ganó, en 1999, el Concurso Kraus, al quehay tener muy en cuenta, y no sólo, como hasta ahora, enpapeles secundarios, es Felipe Bou, que ha acrecido susonoridad, robustecido su timbre y redondeado su emisión.El algo rudo y rotundo Miguel López Galindo, de torrencialpero algo destemplado instrumento, ha de ser mencionadocomo estupendo característico. Siempre solvente, con unmanejo inteligente de su muy lírica y algo hueca voz grave,es Alfonso Echeverría.Entre los barítonos jóvenes, hay que anotar a CarlosBergasa, de timbre tenoril pero pastoso, y a José JuliánFrontal, de vibrato más acusado y más mate de sonoridadpero de expresividad más reconocible. Y, más recientemente,tras largos años de brega en el coro del Teatro de laZarzuela, a Juan Jesús Rodríguez, sólido, compacto, todavíaalgo rígido en la dicción y en el matiz. Y a José AntonioLópez, de timbre oscuro y buen metal, otro alumno de Chova,que se empieza a desempeñar en cometidos de importancia.Todavía colocaríamos a otra joven voz, la de JavierGalán, de timbre brillante y muy fácil emisión.Los tenores aparecen representados hoy fundamentalmentepor Aquiles Machado y José Bros. El primero, de origenvenezolano, antiguo discípulo de Kraus y Mariategui,poseía un instrumento luminoso y bien asentado, rico ypleno de lírico-ligero. Los pasos que ha dado le estánhaciendo perder las primitivas frescura y luminosidad. Elsegundo, al contrario, se ha ido afirmando a partir de unavoz de menor empaque, de menor riqueza. Su seguridadmusical le está permitiendo defenderse incluso en un repertoriode más amplitud. La falta de seguridad y la entrega aun repertorio pesante le impidió prosperar al también alumnode Kraus Jorge Elías, asimismo muy lírico, caluroso ytemperamental, a veces en exceso. Tienen buena encarnaduratenores que vienen pujantes, sobre todo el granadinoJosé Manuel Zapata, de voz clara, extensa, fácil, bien esmaltada.En cuanto supere ciertas desigualdades, asiente laemisión y perfeccione el apoyo podrá dar aún mejor juegodel que está dando. Menos radiante, de instrumento máslleno, es Gustavo Casanova, que ha de afirmar su tesitura delírico y olvidarse de aventuras spinto nada productivas.Emilio Sánchez, ya citado, y Luis Dámaso, de voz frescay extensa, que ha de eliminar algunos apoyos espurios, sonotros dos tenores en ascenso. Luchan también por unpuesto, dentro de lo muy lírico, el seguro y expresivoEduardo Santamaría, buen característico, el esforzadoFrancesc Garrigosa —destacable su intervención en Laseñorita Cristina de De Pablo—, de emisión algo gangosa,y Antonio Gandía, vencedor en el Kraus, de timbre muyatractivo, entonado aunque todavía algo tímido. Se estánhaciendo un sitio Ángel Rodríguez Rivero, de medios limitadospero bien utilizados y, poco a poco, Manuel de Diego,de voz pequeña pero impostada. Enrique Viana, de relativacalidad vocal y acusado vibrato pero de interesantesplanteamientos técnico-estilísticos, un donizettiano de pro,se dedica ahora más al espectáculo cómico-operístico.El espacio ya no da más de sí. Evidentemente, muchosnombres, quizá alguno importante, se habrán quedadofuera; tanto en lo que respecta a los compositores de óperay sus títulos cuanto a los cantantes de estos 20 últimos años.Nos hemos querido referir en este caso a los más significativosdentro de las nuevas hornadas.Arturo Reverter139

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!