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LA HERENCIA (Edición de Day9)

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Lo único irrefutable, era que ya no estaba allí para ayudarla. Se había quedado<br />

sola y únicamente podía contar consigo misma.<br />

Lo más triste fue que Timothy partió <strong>de</strong> su existencia ignorando que en el<br />

vientre, Dorothy gestaba una nueva vida, fruto <strong>de</strong> ese amor que no pudieron ni<br />

supieron <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r. Tan concentrados en sí mismos y en el ímpetu <strong>de</strong> su pasión,<br />

<strong>de</strong>sestimaron los peligros que los circundaban.<br />

¡Si tan solo se hubiesen marchado a tiempo <strong>de</strong> aquel con<strong>de</strong>nado pueblo!, cuán<br />

diversas hubiesen sido las condiciones que signaron el curso <strong>de</strong> la historia que<br />

acaecería a postrer.<br />

Pasaron casi dos meses, en los que la joven fingió cumplir con todos los<br />

preceptos recomendados, mostrándose inusualmente dócil y contrita. Hasta se le<br />

ocurrió argüir que tal vez había sido víctima <strong>de</strong>l influjo mágico <strong>de</strong> las brujas<br />

Ancianas. Personajes místicos que moraban el sombrío pantano ubicado en las<br />

impenetrables profundida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l bosque aledaño y, no haber sido nunca,<br />

plenamente consciente, <strong>de</strong>l accionar por el que se la censuraba.<br />

Solía repetir con asiduidad y extraviando adre<strong>de</strong> la mirada, haber perdido la<br />

memoria sobre ese lapso <strong>de</strong> tiempo, cuando fuera <strong>de</strong>scubierta en flagrante falta<br />

junto a Jonás. Dicho lo cual, se <strong>de</strong>smoronaba en llanto, falsamente compungido.<br />

Gracias a su gran actuación, no le llevó <strong>de</strong>masiado tiempo convencer a las<br />

beatas <strong>de</strong>votas que dirigían el lugar.<br />

Llegó entonces el día, meticulosamente previsto, en el que el mismísimo<br />

Prefecto vino a visitarle y, como era <strong>de</strong> esperarse, traía consigo una comisión <strong>de</strong>l<br />

Gobernador. Graham proponía a Dorothy redimirse, para ser reinsertada en la<br />

comuna, libre ya <strong>de</strong> toda mella. Por supuesto, luego <strong>de</strong> contraer matrimonio con él<br />

mismo.<br />

¡Vaya que era <strong>de</strong> esperarse! El déspota, advirtiéndose libre <strong>de</strong> la amenaza que<br />

implicaba la rivalidad con su hijo, en sus pretensiones por la joven y, satisfecho por<br />

los laudatorios comentarios que las religiosas le referían respecto <strong>de</strong>l apócrifo<br />

cambio <strong>de</strong> conducta <strong>de</strong> la misma, le ofrecía todo cuanto quisiera.<br />

Mas existía una condición: darle cuanto antes un nuevo here<strong>de</strong>ro. Graham,<br />

había <strong>de</strong>sheredado a Timothy tras los inci<strong>de</strong>ntes que forzaran su <strong>de</strong>stierro,<br />

eliminándolo <strong>de</strong> los registros familiares.<br />

Tan «generosa» propuesta, para Dorothy, no era más que el producto <strong>de</strong> la<br />

exacerbada lívido <strong>de</strong>l viejo Regente, en su <strong>de</strong>seo <strong>de</strong> poseerla.<br />

Desbordante <strong>de</strong> un odio originado en la injusticia, el abandono y el <strong>de</strong>seo <strong>de</strong><br />

revancha, resolvió aceptar. Tanto dolor y <strong>de</strong>solación habían minado sus buenos<br />

sentimientos, atrapada como estaba, en aquel claustro sin salida. Culpaba a Tim,<br />

consi<strong>de</strong>rando irreflexiva que bien habría podido insistir, volver y liberarla.<br />

Desdichadamente, esto nunca sucedió y, por tanto, también le con<strong>de</strong>nó. Persistente<br />

y aferrándose al rencor, preconcibió que, a través <strong>de</strong>l mismo, conseguiría olvidarle.<br />

Por otro lado, el secreto que palpitaba oculto en su vientre, exigía <strong>de</strong> ella<br />

medidas extremas. Siendo quizá este el <strong>de</strong>tonante cardinal en su <strong>de</strong>sapego por quien<br />

fuera en el pasado. Su embarazo, que con todo esfuerzo y artimañas había logrado

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