20.03.2017 Views

LA HERENCIA (Edición de Day9)

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

continúa, <strong>de</strong>sesperada.<br />

—Es <strong>de</strong>finitivo, Él ha comenzado a temer la fuerza <strong>de</strong> tu voluntad. Percibe en<br />

ti un verda<strong>de</strong>ro riesgo para sus propósitos. Uno que no está dispuesto a correr.<br />

Todos, absolutamente todos nosotros, fuimos para Él solo peones <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> su<br />

elaborado juego. Hoy le restan dos opciones válidas para alcanzar el éxito. —Hace<br />

una pausa, tendiendo a resignarse. Prosigue triste. ―O bien se reúne con Amonet,<br />

luego <strong>de</strong>l nacimiento, tras lo cual, tanto tú como yo, seremos sacrificados; o te<br />

fusionas a él, jurándole fi<strong>de</strong>lidad. En este último caso y, he aquí lo <strong>de</strong>mencial <strong>de</strong> todo<br />

esto, prevé incluso traicionar a La Eterna, eliminándola, para <strong>de</strong>spués unirse a la<br />

mujer que anhela <strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace tiempo. Alguien por quien ya la <strong>de</strong>spreciara una vez,<br />

en Salem, cuando Lilith habitaba el cuerpo <strong>de</strong> la Con<strong>de</strong>sa. ―Maggie mira a Richard<br />

con cierto recelo, dado el impacto que sus palabras puedan causarle.<br />

―¡¿De quién hablas, Mag?! ¿Por quién Arthur apostaría una carta tan<br />

azarosa? ―interroga impaciente, Richard.<br />

―Se trata <strong>de</strong> Dorothy, tu abuela ―respon<strong>de</strong> por fin ella, extenuada y recelosa.<br />

Al pobre Richard le parece en extremo discordante e irracional. Está<br />

convencido que la ausencia <strong>de</strong> Arthur esta mañana, implica algún fúnebre objetivo,<br />

pero la verborragia precipitada, imprecisa y vehemente <strong>de</strong> Maggie no le permite<br />

establecer una i<strong>de</strong>a racional al respecto.<br />

―¿Qué dices, mujer? ¡Cálmate! —or<strong>de</strong>na el joven, posando su mano sobre el<br />

rostro <strong>de</strong> Maggie. Tras lo cual y, bajo sobrenatural sortilegio, esta se hun<strong>de</strong> en un<br />

súbito trance hipnótico.<br />

Richard, con toda <strong>de</strong>lica<strong>de</strong>za, proce<strong>de</strong> a recostarla sobre el diván. En tanto<br />

acaricia la frente <strong>de</strong> la joven, aguarda paciente a que recobre la calma. Poniendo a<br />

prueba sus faculta<strong>de</strong>s psíquicas se aboca a ello y, en minutos, consigue franquear los<br />

velos en la mente <strong>de</strong> Maggie. Develando así, lo que tanto aterrorizó a la muchacha,<br />

más allá <strong>de</strong> todo cuanto le narrara.<br />

Entonces, lo ve con claridad. Unas sucesiones <strong>de</strong> imágenes escalofriantes<br />

penetran su propio pensamiento. Sumergiéndose en ellas, experimenta una visión<br />

futurista, en la cual Arthur, teniéndolo a él mismo como víctima, le corta el cuello<br />

con una daga, <strong>de</strong>rramando su sangre para bañarse con ella. Inmediatamente, este<br />

comienza a transformarse diabólico y horrendo, en un ente sin forma humana, <strong>de</strong><br />

enormes proporciones y que <strong>de</strong>stila centellas <strong>de</strong> fuego por los ojos. Totalmente<br />

espantado y <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la misma visión, Richard distingue a Maggie, inmovilizada<br />

contra un grotesco tótem y siendo también sacrificada, esta vez… por Dorothy.<br />

Es espeluznante vislumbrar un ceremonial tan pavoroso y salvaje. Dorothy<br />

apuñala el vientre <strong>de</strong> Maggie, una y otra vez, inmisericor<strong>de</strong>. La sangre vertida por la<br />

joven guarda simétrico <strong>de</strong>stino que la suya y, pronto, se ve cubriendo el cuerpo <strong>de</strong><br />

su abuela, como la <strong>de</strong>l pérfido engendro en que se ha transmutado Arthur.<br />

El estado <strong>de</strong> trance se interrumpe abrupto, cuando Richard oye pasos<br />

aproximándose a la estancia don<strong>de</strong> ambos se encuentran.<br />

Resulta impresionante el modo en que sus sentidos se agudizan con el<br />

transcurso <strong>de</strong> los días. Concentrándose, ensaya visualizar aún más allá <strong>de</strong>l portal <strong>de</strong>

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!