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Libro

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allá celebraron el primer millonario. Yo me sorprendí de cómo<br />

los rusos, después de pasar de la ignorancia total en todo lo<br />

que tenía que ver con el mundo capitalista, lograron hacerse<br />

millonarios de la noche a la mañana. Aunque, claro, no siempre<br />

de la manera más limpia. Las desigualdades sociales empezaron<br />

a notarse en el segundo lustro de la década de los 80.<br />

A los nicas nos apoyaban nuestros padres ya que el estipendio<br />

que recibíamos del gobierno ruso, era insuficiente.<br />

Mi gran dicha y a la vez mi gran dificultad, fue casarme inmediatamente<br />

después que llegué a la URSS. Fui la primera<br />

nicaragüense que se casó con un nica que estaba allá y<br />

al poco rato quedé embarazada. Allá nació mi hijo mayor.<br />

Y sin embargo, logré destacarme en mis notas académicas.<br />

Estando embarazada, gané las olimpiadas de Física en<br />

mi ciudad y los rusos no podían creerlo. Los rusos creían<br />

que los nicas recibíamos Física desde primer año y en ese<br />

momento yo sólo había aprobado el tercer año de secundaria.<br />

Yo estudié Física por primera vez al llegar a Rusia<br />

y, al poco rato, estaba ganándoles a los árabes, los africanos<br />

y los mismos rusos. Dicen que embarazada uno<br />

se vuelve más inteligente. Yo lo comprobé estando allá.<br />

Mi gran dificultad fue haber sido madre, esposa y estudiante<br />

al mismo tiempo. Me daban 90 rublos para sobrevivir al mes.<br />

A mi esposo le daban 120. Un pollo costaba 30 rublos, así que<br />

imagínate la enorme dificultad que pasamos la gran mayoría<br />

de los nicas. Teníamos que vender botellas de vidrio para sobrevivir.<br />

La gente botaba las botellas en las calles, nosotros las<br />

recogíamos, las lavábamos y luego la íbamos a vender. Sólo<br />

comíamos “pan de centeno”, el más barato, el que nadie quería<br />

ver y costaba 10 centavos. Ese era el pan que comíamos.<br />

En 1990 vine a dejar a mi hijo a Nicaragua por recomendaciones<br />

del pediatra. Mi hijo había sido afectado por la radiación ex-<br />

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