Claves - UGT Andalucía
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de la economía y sujeto, además, a intereses<br />
políticos y grupos de poder que no siempre ni<br />
son los generales ni los más favorables a las<br />
economías como la española o la andaluza Las<br />
decisiones pretendidamente asépticas de los<br />
funcionarios del Banco Central se presentan<br />
como intentos de contentar a todas las muy<br />
heterogéneas economías europeas, pero la<br />
realidad es que a la postre terminan dando<br />
un saldo muy asimétrico con ganadores y<br />
perdedores netos de las medidas que adopta<br />
Cómo hemos llegado hasta aquí<br />
La actual Europa ha sido construida atendiendo<br />
preferencialmente a los aspectos financieros<br />
y monetarios frente al resto de ámbitos<br />
económicos, lo que ha provocado no solo<br />
los problemas funcionales que acabo de<br />
señalar sino también un incremento de las<br />
desigualdades regionales dentro de la propia<br />
Europa<br />
España, como otros países periféricos, ha<br />
perdido la batalla competitiva frente a países<br />
del centro de Europa como Alemania, y se ha<br />
visto obligada a estimular la demanda interna<br />
mediante la propulsión que proporciona el<br />
crédito La batalla perdida en la lucha por la<br />
competitividad en un entorno de grandes<br />
asimetrías y realizada a partir de la presión<br />
sobre los salarios llevó al déficit comercial y a la<br />
necesidad de endeudamiento Éste se financió<br />
hipertrofiando la circulación crediticia y gracias<br />
a que el euro proporciona ventajas a los bancos<br />
que operan en los países periféricos (ventajas<br />
sobre el dólar y ventajas respecto a los tipos<br />
de interés reales) de modo que les salía muy<br />
rentable incrementar su oferta de liquidez en<br />
estos últimos (aunque ello haya tenido a la<br />
postre los problemas que se vienen dando en<br />
el sector bancario de oferentes y demandantes<br />
de ese crédito)<br />
La ruptura del modelo de crecimiento basado<br />
en la construcción –que sólo pudo sostenerse<br />
gracias al desarrollo del sistema financiero y al<br />
papel jugado por los créditos- ha acabado con<br />
este esquema que sostuvo el crecimiento de los<br />
últimos años y como eso ha ocurrido cuando ya<br />
no se dispone, como en épocas anteriores de<br />
la posibilidad de devaluar la moneda, el ajuste<br />
se ha querido realizar a través de los salarios<br />
Esta es, sin embargo, una alternativa que resulta<br />
aparentemente viable (puesto que parece que<br />
eso es lo razonable para que <strong>Andalucía</strong> sea así<br />
más competitiva frente al exterior) pero que en<br />
realidad lleva a un callejón sin salida porque,<br />
aunque sea completamente cierto que resulte<br />
imprescindible mejorar el saldo comercial que<br />
en <strong>Andalucía</strong> es profundamente deficitario (en<br />
torno a un 13% del PIB), lo cierto es que resulta<br />
imposible e insostenible que todas las regiones<br />
o países pueden orientar al mismo tiempo su<br />
crecimiento hacia la exportación mediante la<br />
vía de bajar salarios cuando la mayor parte del<br />
comercio se realiza entre los propios países<br />
europeos Y esto es así porque necesariamente<br />
tiene que existir en alguna parte la capacidad de<br />
compra suficiente para adquirir los productos<br />
exportados por otros, so pena de generar,<br />
como al final ha sucedido, un endeudamiento<br />
insoportable Tan insostenible es esa estrategia<br />
que incluso algunos países como China, cuyo<br />
modelo de crecimiento agresivo y basado en<br />
salarios bajos de la década pasada estuvo<br />
orientado hacia el exterior, ahora están con la<br />
mirada puesta en la subida de salarios para<br />
poder fortalecer su mercado interno<br />
¿Qué necesita <strong>Andalucía</strong>?<br />
reflexiones socio<br />
laborales de la<br />
<strong>UGT</strong> <strong>Andalucía</strong><br />
En los últimos tiempos estamos comprobando<br />
claramente que un modelo europeo basado<br />
en la constante extraversión de la economía<br />
alemana hacia el exterior se conjuga muy<br />
difícilmente con la estabilidad y el desarrollo<br />
de las demás economía y especialmente de las<br />
más periféricas ya atrasadas<br />
<strong>Andalucía</strong>, y España, pueden optar por seguir<br />
tratando de insertarse en este modelo pero<br />
es poco probable que esa sea una estrategia<br />
exitosa cuando la propia Alemania ha optado en<br />
los últimos años por seguir el modelo de bajos<br />
salarios interiores y fuerte endeudamiento en el<br />
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