08.05.2013 Views

Dobraczynski. Cartas de Nicodemo

Dobraczynski. Cartas de Nicodemo

Dobraczynski. Cartas de Nicodemo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Querido Justo:<br />

CARTA II<br />

Viendo pa<strong>de</strong>cer a Rut, intento a toda costa hacer algo. Pue<strong>de</strong> que<br />

esto no sea sino un inconsciente buscar remedio para mi propia<br />

<strong>de</strong>sesperación. Para el caso, da lo mismo. Prefiero imaginar que la<br />

ayudo en algo a tener que contemplar con los brazos cruzados su<br />

rostro cada día más pálido, sus párpados transparentes surcados <strong>de</strong><br />

pequeñas venas violeta, o escuchar su respiración, que es como un<br />

gemido. ¡Oh, Adonai! ¡Esto sobrepasa las fuerzas humanas! Job<br />

perdió a sus hijos, pero no está escrito que fuera testigo <strong>de</strong> sus<br />

sufrimientos. El dolor ajeno crea un mundo cerrado <strong>de</strong> <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia,<br />

un mundo en el que es imposible vivir y <strong>de</strong>l que no se pue<strong>de</strong> huir ni<br />

con la muerte. Aunque, a <strong>de</strong>cir verdad, cuando se ha <strong>de</strong> escoger entre<br />

el dolor y la muerte no se elige ninguno <strong>de</strong> los dos.<br />

Así, cuando el Gran Consejo <strong>de</strong> los fariseos envió a Chuz, Eleazar<br />

y Samuel para que observaran más <strong>de</strong> cerca la actuación <strong>de</strong> Juan,<br />

hijo <strong>de</strong> Zacarías, yo me uní a ellos. Y no lo hice sólo por curiosidad.<br />

Han arraigado fuertemente entre nosotros las historias <strong>de</strong> los libros<br />

sagrados sobre profetas que curan y resucitan a las gentes. Recordé<br />

al hijo <strong>de</strong> la viuda, en Sarepta <strong>de</strong> Sidón... Ella era pagana y, aunque<br />

piadosa, no <strong>de</strong> nuestra sangre ni <strong>de</strong> nuestra fe. Yo, en cambio, soy<br />

judío, fiel seguidor <strong>de</strong> la Ley, fariseo y consumidor <strong>de</strong> teruma. Toda mi<br />

existencia está consagrada al Señor. No escatimo limosnas, no me<br />

trato con los paganos, observo la pureza, cumplo los ayunos y rezo<br />

las oraciones. Pero no quiero alabarme... Cuando yo mismo o alguien<br />

lo hace, siento al primer momento cierta satisfacción y alegría que<br />

pronto <strong>de</strong>saparecen... Ocurre como cuando se come un higo sabroso<br />

y <strong>de</strong>spués ningún otro fruto parece bueno. A<strong>de</strong>más, ya me conoces...<br />

No quiero vanagloriarme, pero tengo la impresión <strong>de</strong> que mi trabajo<br />

tiene un valor real. Enseño y sé que soy escuchado. Las hagadás que<br />

escribo <strong>de</strong> un modo accesible a todos hablan <strong>de</strong> la gran<strong>de</strong>za, <strong>de</strong>l<br />

17

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!