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Estado y configuración territorial en el Ecuador 79<br />
Se produce entonces una más consolidada diferenciación y articulación<br />
regional especializada, en la que la Costa proveía los productos de exportación y<br />
algunos alimentos para el mercado interno y la Sierra la producción de clima templado<br />
para el consumo nacional (Larrea, 2006: 72-74).<br />
A diferencia de la época cacaotera, no se monopolizaron las actividades<br />
productivas y predominaron las propiedades medianas en manos de colonos.<br />
En 1964 la extensión promedio de la tierra destinada a la producción bananera<br />
era de 64 hectáreas (Acosta, 2006: 100-101). No obstante, la estructura de apropiación<br />
del excedente presenta altos niveles de concentración a favor de los<br />
agroexportadores, mientras que los pequeños y mediano productores son quienes<br />
asumen las pérdidas cuando la demanda se contrae. Desde entonces hasta<br />
la actualidad se han mantenido los fuertes conflictos entre productores y exportadores.<br />
Las fracciones comerciales y financieras de Guayaquil aumentaron su<br />
capacidad de apropiación y reinversión del excedente. En 1964 el 50% de las<br />
exportaciones era manejado por apenas tres empresas. El 90% de las exportaciones<br />
estaba en manos de no más de ocho empresas. El proceso de concentración<br />
de las exportaciones se profundizó hacia los años noventa, cuando apenas<br />
cinco empresas controlaban el 87% de las exportaciones (Larrea, 1991: 106, cit.<br />
por Acosta, 2006: 101-102).<br />
Durante este período se impulsa el rol planificador del Estado y su papel en<br />
el desarrollo económico. Sin embargo, el Estado no logra impulsar un desarrollo<br />
autónomo y se convirtió en el soporte para la alianza de los antiguos grupos dominantes<br />
con una burguesía modernizante. A través de la política pública impulsada<br />
por el Estado desarrollista, se transfirieron masivamente excedentes a las burguesías<br />
urbano oligopólicas, del campo a la ciudad, de la agricultura a la industria, de<br />
los exportadores a los importadores industriales, etc. (Acosta, 2006: 111-113).<br />
Las intenciones planificadoras del Estado tuvieron que enfrentar las múltiples<br />
respuestas regionales, en un arduo proceso de negociación que desembocó<br />
en la creación de varios organismos regionales. Los grupos regionales terminaron<br />
imprimiendo sus propias lógicas a estos organismos, impidiendo una intervención<br />
desde una perspectiva nacional (Ramón, 2004: 167, 175).<br />
En este período también surgen los partidos y movimientos políticos de<br />
corte populista, el CFP y el Velasquismo (Ramón, 2004: 175).<br />
La característica fundamental en la configuración de los poderes locales<br />
durante el período bananero es la pérdida de correspondencia entre poder local y<br />
municipio. Existe poder local en aquellos espacios dinámicos de la economía que<br />
logran articular a las pequeñas élites ubicadas fuera de estos circuitos comerciales,<br />
estableciendo un sistema de dominación local (Ramón, 2004: 175).<br />
La Reforma Agraria<br />
En el proceso de modernización del agro ecuatoriano confluyeron las condiciones<br />
nacionales e internacionales. A nivel internacional existió una enorme<br />
presión norteamericana para evitar revoluciones campesinas. A nivel nacional,<br />
una dictadura nacional que contó con el apoyo de la burguesía costeña, un<br />
grupo de terratenientes, las universidades, la iglesia y la presión campesina.<br />
Pese a todo este apoyo, la reforma agraria en el país fue muy tímida (Ramón,<br />
2004: 180).