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Borges, Jorge Luis - Obras Completas - Literatura Argentina UNRN

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218 JORGE LUIS. BORGES—OBRAS COMPLETAS<br />

sin duda, pero cuya animación eventual queda a cargo nuestro.<br />

No es realmente expresivo: se limita a registrar una realidad,<br />

no a representarla. Los ricos hechos a cuya postuma alusión nos<br />

convida, importaron cargadas experiencias, percepciones, reacciones;<br />

éstas pueden inferirse de su relato, pero no están en él.<br />

Dicho con mejor precisión: no escribe los primeros contactos de<br />

la realidad, sino su elaboración final en concepto. Es el método<br />

clásico, el observado siempre por Voltaire, por Swift, por Cervantes.<br />

Copio un segundo párrafo, ya casi abusivo, de este último:<br />

"Finalmente a Lotario le pareció que era menester en el espacio<br />

y lugar que daba la ausencia de Anselmo, apretar el cerco a<br />

aquella fortaleza, y así acometió a su presunción con las alabanzas<br />

de su hermosura, porque no hay cosa que más presto rinda.<br />

y allane las encastilladas torres de la vanidad de las hermosas<br />

que la misma vanidad puesta en las lenguas de la adulación.<br />

En efecto, él con toda diligencia minó la roca de su entereza<br />

con tales pertrechos, que aunque Camila fuera toda de bronce,<br />

viniera al suelo. "Lloró, rogó, ofreció, aduló, porfió y fingió Lotario<br />

con tantos sentimientos, con muestras de tantas veras, que<br />

dio al través con el recato de Camila, y vino a triunfar de lo<br />

que menos se pensaba y más deseaba." (Quijote, I, capítulo 34.)<br />

Pasajes como los anteriores, forman la extensa mayoría de la<br />

literatura mundial, y aun la menos indigna. Repudiarlos para<br />

no incomodar a una fórmula, sería inconducente y ruinoso. Dentro<br />

de su notoria ineficacia, son eficaces; falta resolver esa contradicción.<br />

Yo aconsejaría esta hipótesis: la imprecisión es tolerable o<br />

verosímil en la literatura, porque a ella propendemos siempre<br />

en la realidad. La simplificación conceptual de estados complejos<br />

es muchas veces una operación instantánea. El hecho mismo de<br />

percibir, de atender, es de orden selectivo: toda atención, toda<br />

fijación de nuestra conciencia, comporta una deliberada omisión<br />

de lo no interesante. Vemos y oímos a través de recuerdos, de<br />

temores, de previsiones. En lo corporal, la inconciencia es una<br />

necesidad de los actos físicos. Nuestro cuerpo sabe articular este<br />

difícil párrafo, sabe tratar con escaleras, con nudos, con pasos a<br />

nivel, con ciudades, con ríos correntosos, con perros, sabe atravesar<br />

una calle sin que nos aniquile el tránsito, sabe engendrar,<br />

sabe respirar, sabe dormir, sabe tal vez matar: nuestro cuerpo,<br />

no nuestra inteligencia. Nuestro vivir es una serie de adaptaciones,<br />

vale decir, una educación del olvido. Es admirable que la<br />

primer noticia de Utopía que nos dé Tilomas Moore, sea su perpleja<br />

ignorancia de la "verdadera" longitud de uno de sus<br />

puentes.<br />

Releo, para mejor investigación de lo clásico, el párrafo de

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