10.05.2013 Views

JEFFADAMS – Salmo 119 Una odisea al corazón de Dios

JEFFADAMS – Salmo 119 Una odisea al corazón de Dios

JEFFADAMS – Salmo 119 Una odisea al corazón de Dios

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

96 SALMO <strong>119</strong>: UNA ODISEA AL CORAZÓN DE DIOS<br />

Es por ello que en el libro <strong>de</strong> Proverbios dice que el principio <strong>de</strong> la sabiduría<br />

es el temor <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> (Pr. 1:7 y 9:10). Cuando usted genuinamente llega<br />

a enten<strong>de</strong>r quién es <strong>Dios</strong>, tendrá suficiente entendimiento para obe<strong>de</strong>cer lo<br />

que dice y tendrá la sabiduría para ver cómo todo encaja.<br />

Un concepto a aplicarse<br />

¿Está usted re<strong>al</strong>mente <strong>de</strong>dicado <strong>al</strong> temor <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>? Es necesario tratar con<br />

este asunto primero. Antes <strong>de</strong> pedirle a <strong>Dios</strong> que le confirme su p<strong>al</strong>abra,<br />

¿pue<strong>de</strong> <strong>Dios</strong> confiar en usted? Este tipo <strong>de</strong> sabiduría, el crecimiento en la<br />

confirmación <strong>de</strong> la P<strong>al</strong>abra <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, es resultado <strong>de</strong> avanzar por una espir<strong>al</strong><br />

ascen<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> crecimiento. Entre más usted confíe en la P<strong>al</strong>abra <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>,<br />

más podrá <strong>Dios</strong> confirmársela a usted.<br />

Hace muchos años hice mi primer viaje en motocicleta. (Después llegué a<br />

ser propietario <strong>de</strong> una motocicleta, la cu<strong>al</strong> conduje <strong>de</strong> un extremo <strong>de</strong><br />

Centroamérica <strong>al</strong> otro.) Ese primer viaje fue una experiencia singular. Un<br />

amigo y yo teníamos que viajar <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Managua, Nicaragua hasta Puerto<br />

Cortéz, Honduras. Delante nuestro teníamos 750 kilómetros <strong>de</strong> caminos<br />

montañosos. Al s<strong>al</strong>ir por las suaves colinas <strong>al</strong> norte <strong>de</strong> Managua hacia las<br />

montañas distantes, nos topamos con las primeras curvas en el camino. Mi<br />

amigo inclinó su motocicleta Honda 750 hacia la <strong>de</strong>recha <strong>al</strong> eI).trar en la<br />

curva. Yo, que iba <strong>de</strong> pasajero, me incliné hacia la izquierda. El trató <strong>de</strong><br />

compensar, inclinando la máquina hacia la izquierda. Yo me incliné hacia la<br />

<strong>de</strong>recha.<br />

Luego <strong>de</strong> unos cuantos kilómetros <strong>de</strong> repetirse esto, mi amigo se <strong>de</strong>tuvo,<br />

se quitó su casco, me sonrió y me dijo con firmeza: «Mira, si quieres seguir<br />

viajando conmigo, vas a tener que apren<strong>de</strong>r a inclinarte hacia las. curvas. Yo<br />

sé que pareciera que nos vamos a caer, pero te aseguro que no.» El continuó<br />

dándome unas p<strong>al</strong>abras <strong>de</strong> explicación sobre el efecto <strong>de</strong> la fuerza centrífuga,<br />

el ímpetu, los giroscopios y cosas afines. Yo había estudiado física. Ment<strong>al</strong>mente,<br />

sabía todo lo que me estaba diciendo. Confiaba en mi amigo. El<br />

tenía una motocicleta muy buena. Sin embargo, todos mis instintos me <strong>de</strong>cían:<br />

«Si esta motocicleta se inclina hacia la <strong>de</strong>recha, ¡yo me muevo hacia la<br />

izquierda!» Yo necesitaba esas p<strong>al</strong>abras <strong>de</strong> confirmación. A pesar <strong>de</strong> mis temores,<br />

empecé a inclinarme hacia las curvas. No nos caímos. Con cada curva<br />

que pasamos empecé a adquirir confianza. Volvía a apren<strong>de</strong>r que podía<br />

confiar en mi amigo. Mi confianza en su motocicleta y en las leyes <strong>de</strong> la<br />

física aumentó, a pesar <strong>de</strong> que antes las conocía. . .<br />

Con cada curva <strong>de</strong> la vida, <strong>Dios</strong> quiere confirmar su P<strong>al</strong>abra a nosotros.<br />

Así apren<strong>de</strong>mos una y otra vez que po<strong>de</strong>mos confiar en El y en Su P<strong>al</strong>abra.<br />

¿Se atreverá a inclinarse con <strong>Dios</strong> en las curvas?<br />

PROTÉGENIE (v. 39)<br />

Muy cercanamente ligado a la necesidad <strong>de</strong> confirmación hay un clamor<br />

por protección contra el oprobio. -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!