Desarrollo
4nnCHl
4nnCHl
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Juventud: realidades y retos para un desarrollo con igualdad 161<br />
Otros programas que atañen a la juventud y fueron creados para<br />
prevenir la violencia son los que trabajan con “policías comunitarias”.<br />
Algunos países han desarrollado programas a nivel de ciudades (Bogotá,<br />
Sao Paulo, Belo Horizonte), mientras que otros cuentan con programas<br />
importantes a nivel nacional, como es el caso de Nicaragua. El modelo<br />
de prevención de violencia de Nicaragua articula todos los ministerios<br />
que tienen injerencia en acciones de prevención y atención a la violencia<br />
en el marco de un “Modelo de Responsabilidad Compartida” en el que<br />
participan. Incluye también el apoyo de la ciudadanía a través de los<br />
Gabinetes de la Familia, la Comunidad y la Vida conformados por<br />
habitantes de las mismas comunidades. En el marco de este modelo,<br />
la Policía articula un modelo “preventivo, proactivo y comunitario”<br />
que incluye la profesionalización permanente del cuerpo policial y<br />
la coordinación con la policía voluntaria y dos entidades adicionales<br />
—la Comisaría de la Mujer y la Niñez y la Dirección de Asuntos<br />
Juveniles— que atienden de manera particular la violencia juvenil.<br />
Entre las acciones de la Dirección de Asuntos Juveniles se encuentra<br />
la intervención cercana a jóvenes que tienen conductas violentas<br />
y a jóvenes involucrados en actividades de pandillas o que tienen<br />
conflictos con la ley. El propósito es atender a estos jóvenes mediante<br />
una estrategia pacífica aplicando un protocolo de seis pasos (tregua,<br />
diagnóstico, atención, armisticio, desmovilización y reinserción social),<br />
en virtud del compromiso de los mismos jóvenes, de sus familias y de<br />
la comunidad.<br />
De acuerdo con lo señalado por la OPS (2006), las experiencias<br />
de policías comunitarias de América Latina que han sido evaluadas<br />
logran incrementar la confianza pública en la policía y acercarse a<br />
la comunidad. No necesariamente disminuyen las tasas de abuso<br />
policial, porque para ello es necesario acompañar estos programas<br />
con estrategias de reentrenamiento y con sistemas de monitoreo y<br />
alarma temprana frente a infracciones reiteradas por algunos policías.<br />
Las evidencias son menos claras en relación con la disminución de los<br />
actos de violencia y delincuencia. En algunos países también se han<br />
implementado programas que promueven vías de inserción social para<br />
los jóvenes que se encuentran en situaciones marginales, en riesgo<br />
de cometer actos de violencia o que ya los hayan cometido. Este es el<br />
caso del Programa de prevención con niños, niñas y adolescentes en<br />
riesgo de desarrollar carreras delictuales de Chile; el programa Escola<br />
Aberta en el Brasil; el Programa para Fortalecer Medidas de Protección a<br />
Adolescentes Infractores en el Ecuador; Jóvenes Protagonistas y Escuelas<br />
Abiertas y la Liga Atlética Juvenil en Guatemala. Mediante la promoción<br />
de actividades como talleres artísticos o la práctica de deportes entre<br />
los jóvenes, estos programas fomentan la convivencia para prevenir la<br />
delincuencia juvenil o el consumo de drogas.