29.01.2023 Views

Nosotros en la luna - Alice Kellen

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

17

RHYS

Bajé la tapa del portátil y me quedé unos segundos mirando por la ventana.

Era un día caluroso y acababa de amanecer. Medité sobre mi vida allí, en

Los Ángeles, hasta que noté que el cuerpo de Sarah se movía a mi espalda.

Seguía tumbada en la cama, desnuda, con las sábanas blancas hechas un

ovillo a un lado.

Sonreí y me acerqué. Estaba adormilada.

—¿Qué estás haciendo a estas horas?

—Contestar a un correo. ¿Quién se ducha antes?

—Tú —dijo rápidamente cerrando los ojos.

Busqué algo de ropa limpia que ponerme y luego me metí en el cuarto

de baño. No encendí el agua caliente. Me estremecí de la impresión ante el

primer chorro frío, pero permanecí inmóvil debajo hasta que me

acostumbré, y la sensación empezó a ser placentera. Una vez oí decir algo

así como que el dolor, un baño de agua helada o el vértigo hacían que uno

despertase de golpe, que fuese consciente de su propia piel, de esa

sensación de estar vivo. Algo físico, directo. Algo que nos saque de la

comodidad que buscamos por instinto.

Cuando salí, ya olía a café recién hecho y Sarah estaba hablando por

teléfono. Me fijé entonces en la luz que entraba por la ventana, el efecto que

creaba, cómo se curvaba ligeramente y simulaba un pequeño arco iris que

se reflejaba en la mesa blanca de la cocina.

—¿Qué estás mirando? —Sarah me abrazó por detrás cuando colgó.

—Nada. ¿Te han dicho si tienes hoy el rodaje? —pregunté.

Asintió y me dio un beso suave en los labios antes de alejarse para

prepararse una taza de café. Esperé hasta que acabó para servirme la mía y

los dos desayunamos en silencio mientras quedaban atrás los minutos del

reloj que estaba colgado en lo alto de la pared.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!