14.07.2023 Views

El-Sutil-Arte-de-Que-Te-Importe-Un-Carajo-Un-Enfoque-Disruptivo-Para-Vivir-Una-Buena-Vida-PDFDrive

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

estaba diciendo”. El dato desafortunado es que la mayoría de lo que llegamos a

“conocer” y a creer es producto de las inexactitudes innatas y sesgos presentes

en nuestros cerebros. Muchos o incluso la mayoría de nuestros valores son

producto de eventos que no son representativos del mundo en general o son el

resultado de un pasado totalmente malentendido.

¿Cuál es el resultado? Muchas de nuestras creencias están equivocadas. O

para ser más exacto, todas nuestras creencias están equivocadas: algunas sólo

están menos equivocadas que otras. La mente humana es un revoltijo de

inexactitud. Y aunque esto te ponga incómodo, es un concepto increíblemente

importante que debemos aceptar, como veremos más adelante.

Ten cuidado con lo que crees

En 1988, mientras acudía a terapia, la periodista y autora de feminismo Meredith

Maran llegó a una conclusión alarmante: su padre había abusado sexualmente de

ella cuando era niña. Descubrirlo fue una conmoción para ella, un recuerdo

reprimido del que no había estado consciente durante la mayor parte de su vida

adulta. Pero a la edad de 37 años, enfrentó a su progenitor y también le contó a

sus familiares lo que había sucedido.

Las noticias de Meredith horrorizaron a la familia completa. Su padre de

inmediato negó haber hecho eso. Algunos miembros del clan apoyaron a

Meredith y otros a su padre. El árbol genealógico se partió en dos. Y el dolor que

había definido la relación de Meredith con su procreador desde mucho antes de

esta acusación, se esparció como moho sobre ramas. La situación destruyó a

todos.

Entonces, en 1996, Meredith llegó a otra conclusión alarmante: en realidad,

su padre nunca había abusado de ella. (Lo sé, ¡ups!) Ella, con la ayuda de un

bienintencionado terapeuta, había inventado el recuerdo. Consumida por la

culpa, pasó el resto de la vida de su padre intentando reconciliarse con él y con

los otros integrantes de su familia, siempre pidiendo disculpas y dando

explicaciones. Pero ya era demasiado tarde. Su padre falleció y la familia nunca

volvió a ser la de antes.

Resulta que el caso de Meredith no era el único. Como lo describe en su

autobiografía Mi mentira: la historia verdadera de una memoria falsa, durante

los años ochenta, muchas mujeres acusaron a miembros varones de sus familias

de abuso sexual sólo para desdecirse años después. De manera similar, en el

transcurso de esa misma década, muchas personas aseguraban que en algunos

lugares se practicaban cultos satánicos en los que se abusaba de niños, a pesar de

que las investigaciones de la policía, en decenas de ciudades, nunca encontraron

evidencia de esas locas prácticas.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!