Anais 2º Congresso Latino-Americano de Restauraçao de Metais

DORADO
Para realizar el dorado de las probetas primero fue necesario lavar las láminas
con un detergente alcalino, que eliminara la mayor cantidad posible de material graso
de la pasta abrasiva, y limpiar con acetona.
Debido a la dificultad y toxicidad que representaba la aplicación del dorado por
amalgamación, el recubrimiento de oro se logró mediante una reacción de
electrodeposición, que se realizó sumergiendo las probetas en una solución
comercial de cianuro de oro, de nombre ASTEG®, y empleando como ánodo un
recipiente de aluminio. La inmersión duró 20 minutos, en los cuales fue necesario
girar constantemente las placas a fin de lograr que la deposición fuera lo más
homogénea posible.
Cada una de estas probetas fue pesada en una balanza analítica de rango
0.0001gr.
Imagen. 3. Apariencia de las probetas luego del proceso de dorado.
CORROSIÓN
Las láminas recubiertas fueron colocadas en una atmósfera de ácido sulfúrico,
durante un periodo de un mes. Sin embargo, no mostraron corrosión, así que fue
necesario corroerlas mediante la inmersión en una solución de sulfuro de amonio en
grado reactivo analítico, de marca Reasol®, en concentración 20% v/v en agua
destilada, durante 4 días en los que se voltearon algunas veces para lograr una capa
uniforme de productos de corrosión. La capa de sulfuro de plata logrado por este
medio, resultó ser muy compacta y bastante continua.
341