Anais 2º Congresso Latino-Americano de Restauraçao de Metais

MÉTODOS DE LIMPIEZA
De estas 10 probetas, una se eligió como muestra patrón y las nueve
restantes fueron divididas en grupos de tres, a fin de aplicar a cada grupo un método
de limpieza diferente.
Los métodos usados fueron:
Limpieza electroquímica con carbonato de sodio aplicado al 2%, 3% y 5% p/v.
Limpieza con tiourea ácida aplicada al 3%, 5% y 8% p/v, en solución de ácido
fosfórico 5% v/v.
Limpieza con nitrato de quitosan 0.5%,1%, y 2% p/v.
LIMPIEZA ELECTROQUÍMICA
La corrosión de los metales es una reacción electroquímica, la limpieza
electroquímica busca detenerla, e incluso revertirla mediante la reducción del metal,
que se basa en la asociación de dos metales que ocupan diferentes posiciones en la
serie electromotriz o serie galvánica sin corriente eléctrica aplicada exteriormente.
El método más simple consiste en envolver el objeto en papel aluminio como
ánodo, y colocarlo en un recipiente de vidrio con una solución de electrolito,
comúnmente: Na 2 CO 3 5-10 % o NaOH al 1-2%. El objeto se deja en la solución
hasta que esté limpio o el Al se oxide por completo, la reacción puede ser acelerada
calentando la solución. El proceso puede ser repetido hasta lograr el resultado
deseado.
El electrolito no reacciona con la pieza, si bien se encuentra disociado, sus
iones no reaccionan formando sal alguna, funcionan solamente permitiendo el flujo
de electrones entre los electrodos, aunque después de un lapso de reacción el
aluminio oxidado puede llegar a reaccionar con los iones carbonato, por ejemplo,
pero no con la plata.
Al final el objeto debe ser enjuagado para eliminar cualquier resto del
electrolito que provoque eflorescencias salinas, ligeramente pulido con una tela
suave o mota de algodón (o incluso con abrasivos muy finos) para que recupere el
brillo.
Cuando se aplica sobre plata únicamente, tiene la ventaja de no eliminar
material, sin embargo cuando se trata de recubrimientos metálicos tal característica
no resulta útil, ya que la producción de hidrógeno que sucede durante la reacción de
reducción, puede provocar daños al recubrimiento.
En este caso, el método fue aplicado por inmersión en tres diferentes
concentraciones de Na 2 CO 3 : 2, 3 y 5% p/v, empleando papel aluminio como ánodo.
Las probetas en tratamiento fueron revisadas cada periodo de 5 minutos hasta llegar
a los 15 minutos, luego de los cuales fueron retiradas y enjuagadas con agua
destilada.
Los resultados fueron los siguientes:
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