13.07.2015 Views

Verdad y Método I

Verdad y Método I

Verdad y Método I

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

41e indeterminadamente a una interpretación dependiente del propio estado deánimo, sino que nos habla con un significado bien determinado. Y lomaravilloso y misterioso del arte es que esta pretensión determinada no essin embargo una atadura para nuestro ánimo, sino precisamente lo que abreun campo de juego a la libertad para el desarrollo de nuestra capacidad deconocer. El propio Kant hace justicia a este hecho cuando dice16 que el artedebe «considerarse como naturaleza», esto es, que debe gustar sin que seadvierta la menor coacción por reglas cualesquiera. En el arte no atendemosa la coincidencia deliberada de lo representado con alguna realidadconocida; no miramos para ver a qué se parece, ni medimos el sentido de suspretensiones según un patrón que nos sea ya conocido, sino que por elcontrario este patrón, el «concepto», se ve «ampliado estéticamente» de unmodo ilimitado 17.La definición kantiana del arte como «representación bella de una cosa» 18tiene esto en cuenta en cuanto que en la representación del arte resulta belloincluso lo feo. Sin embargo, la esencia del arte no se pone suficientemente aldescubierto por el mero contraste con la belleza natural. Si sólo serepresentase bellamente el concepto de una cosa, esto volvería a no ser másque una representación «escolar», y no satisfaría más que una condiciónineludible de toda belleza. Pero precisamente también para Kant el arte esmás que «representación bella de una cosa»: es representación de ideasestéticas, esto es, de algo que está más allá de todo concepto. En la idea deKant es el concepto del genio el que formula esta perspectiva.No se puede negar que la teoría de las ideas estéticas, esta representaciónpermitiría al artista ampliar ilimitadamente el concepto dado y dar vida allibre juego de las fuerzas del ánimo, tiene para el lector actual unaresonancia poco feliz. Parece como si estas ideas se asociasen a un conceptoque ya era dominante, como los atributos de una divinidad se asocian a sufigura. La primacía tradicional del concepto racional frente a larepresentación estética inefable es tan fuerte que incluso en Kant surge lafalsa apariencia de que el concepto precede a la idea estética, siendo así que,la capacidad que domina en este caso no es en modo alguno elentendimiento sino la imaginación 19. El teórico del arte encontrará por lodemás testimonios suficientes de las dificultades que encontró Kant para quesu idea básica de la inconcebibilidad de lo bello, que es la que asegurarla suvinculatividad, se sostuviese sin por eso tener que introducir sin quererlo laprimacía del concepto.Sin embargo, las líneas fundamentales de su razonamiento están libres deeste género de deficiencias, y muestran una notable coherencia que culminaen la función del concepto del genio' para la fundamentación del arte. Aunsin entrar en una interpretación demasiado detenida de esta «capacidad parala representación de las ideas estéticas», puede apuntarse que Kant no se veaquí desviado por su planteamiento filosófico trascendental, ni forzado atomar el atajo de una psicología de la producción artística. La irracionalidaddel genio trae por el contrario, a primer plano, un momento productivo de lacreación de reglas, que se muestra de la misma manera tanto al que creacomo al que disfruta: frente a la obra de arte bella no deja libre ningunaposibilidad de apresar su contenido más que bajo la forma única de la obra yen el misterio de su impresión, que ningún lenguaje podrá nunca alcanzardel todo. El concepto del genio se corresponde, pues con lo que Kantconsidera decisivo en el gusto estético: el juego aliviado de las fuerzas delánimo, el acrecentamiento del sentimiento vital que genera la congruenciade imaginación y entendimiento y que invita al reposo ante lo bello. Elgenio es el modo de manifestarse este espíritu vivificador. Pues frente a larígida regulatividad de la maestría escolar el genio muestra el libre empujede la invención y una originalidad capaz de crear modelos.e) La relación entre gusto y genioAsí las cosas, habrá que preguntarse cómo determina Kant la relaciónrecíproca de gusto y genio. Kant retiene la primacía de principio del gusto,en cuanto que también las obras de las bellas artes, que son arte del genio, seencuentran bajo la perspectiva dominante de la belleza. Podrán considerarsepenosos, frente a la invención del genio, los esfuerzos por mejorar que pideel gusto: éste seguirá siendo, sin embargo, la disciplina necesaria que debeatribuirse al genio. En este sentido, Kant entiende que en caso de conflictoes el gusto el que detenta la primacía; sin embargo ésta no es una cuestiónde significado demasiado fundamental. Básicamente, el gusto se asientasobre las mismas bases que el genio. El arte del genio consiste en hacercomunicable el libre juego de las fuerzas del conocimiento. Esto es lo quehacen las ideas estéticas que él inventa. Ahora bien, la comunicabilidad delestado de ánimo, del placer, caracterizaba también al disfrute estético del

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!