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MARX El Capital - Tomo I

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Marx: <strong>El</strong> <strong>Capital</strong>, Libro primero, cap. 23, La ley general de la acumulación capitalista<br />

trabaje en la finca de él, y luego, en su calidad de propietario de la superficie del suelo, impide a los<br />

obreros que ha congregado que encuentren las viviendas adecuadas indispensables para sus vidas. Al<br />

arrendatario de minas" (el explotador capitalista) "no le interesa, desde el punto de vista pecuniario,<br />

oponerse a esa división del negocio, ya que sabe bien que aunque estas últimas pretensiones sean<br />

exorbitantes, las consecuencias no recaerán sobre él; sabe asimismo que los obreros, sobre los que sí<br />

recaen, no están suficientemente educados como para conocer sus derechos sanitarios, y que ni la<br />

vivienda más promiscua ni el agua potable más corrompida serán motivo especial cccccc 88 de una strike<br />

[huelga]" [89].<br />

d) Efecto de las crisis sobre el sector mejor remuuerado<br />

de la clase obrera<br />

Antes que pasemos a los obreros ayrícolas propiamente dichos, otro ejemplo nos mostrará cómo las crisis<br />

afectan incluso al sector mejor remunerado de la clase obrera, a su aristocracia. Se recordará que el año<br />

1857 trajo consigo una de las grandes crisis con las que invariablemente [835] se cierra el ciclo industrial.<br />

<strong>El</strong> plazo siguiente expiró en 1866. Anticipada ya en los distritos fabriles propiamente dichos por la<br />

escasez de algodón, la que desplazó mucho capital de las esferas de inversión habituales a las grandes<br />

sedes centrales del mercado dinerario, la crisis adoptó en esta ocasión un carácter predominantemente<br />

financiero. Su desencadenamiento, en mayo de 1866, estuvo señalado por la bancarrota de un gigantesco<br />

banco londinense, seguida inmediatamente por la ruina de innumerables sociedades dedicadas a los<br />

tejemanejes en el campo de las finanzas. Uno de los grandes ramos industriales londinenses castigados<br />

por la catástrofe fue el de la construcción de barcos de hierro. Durante el período de las transacciones<br />

fraudulentas, los magnates de este ramo no sólo se habían lanzado a una sobreproducción desmedida, sino<br />

que además habían firmado enormes contratos de suministro, especulando con que las fuentes crediticias<br />

seguirían manando con la misma abundancia que antes. Actualmente se ha operado una reacción<br />

aterradora que aun en la hora actual fines de marzo de 1867 afecta a otras industrias londinenses [90].<br />

Para caracterizar la situación de los obreros reproduzcamos el siguiente pasaje, que tomamos de un<br />

detallado informe escrito por un corresponsal del "Morning Star" que visitó, a principios de enero dddddd<br />

de 1867, las zonas más castigadas por la calamidad. "Al este de Londres, en los distritos de Poplar,<br />

Millwall, Greenwich, [836] Deptford, Limehouse y Canning Town, por lo menos 15.000 obreros y sus<br />

familias se encuentran en una situación de miseria extrema; entre ellos, más de 3.000 mecánicos diestros<br />

[...]. Sus fondos de reserva se han agotado luego de una paralización laboral de seis u ocho meses... Tuve<br />

que esforzarme mucho para llegar a la puerta del workhouse [hospicio] (de Poplar), pues la asediaba una<br />

muchedumbre hambrienta. Esperaban bonos para el pan, pero no había llegado todavía la hora del<br />

reparto. <strong>El</strong> patio forma un gran cuadrado, con un alero que corre alrededor, a lo largo de los muros.<br />

Grandes montones de nieve cubrían los adoquines en el medio del patio. Había allí ciertos espacios de<br />

dimensiones reducidas, cercados con mimbre como corrales de ovejas, en los que trabajan los hombres<br />

cuando el tiempo es más benigno. <strong>El</strong> día que visité el asilo los corrales estaban tan llenos de nieve que<br />

nadie podía permanecer en ellos. Los hombres, sin embargo, protegidos bajo el alero, se ocupaban de<br />

macadamizar adoquines. Cada uno se sentaba en un gran adoquín y con un martillo pesado machacaba el<br />

granito, cubierto de hielo, hasta picar 5 bushels eeeeee . Con ello quedaba finalizada su labor diaria y se les<br />

http://www.ucm.es/info/bas/es/marx-eng/capital1/23.htm (35 of 114) [30/08/2002 16:58:48]

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