La Esfinge y el Espejo I.pdf - Editores Alambique
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infernales y desfavorables se situaban al occidente, y<br />
las misteriosas deidades d<strong>el</strong> destino se ubicaban al<br />
norte. Para este pueblo, que sin exagerar podríamos<br />
llamar antecesor directo de Occidente, los griegos<br />
quedaban geográficamente al este, tan al este desde<br />
sus soleadas colinas de Toscana como los fenicios. 2<br />
Todavía para los europeos medievales Grecia era parte<br />
d<strong>el</strong> Oriente, como no fuera por <strong>el</strong> hecho de ser (más o<br />
menos) cristiana, a diferencia de judíos y sarracenos. 3<br />
Pero es probablemente en la alta Edad Media que<br />
“occidente” empieza a asociarse con las antiguas<br />
culturas griega y romana, asociación que se torna<br />
definitiva a partir d<strong>el</strong> Renacimiento y que se convierte<br />
en la única interpretación posible durante <strong>el</strong> siglo<br />
diecinueve. 4 En cambio, hoy día nadie duda en<br />
2 Ciertamente los griegos “propiamente dichos”, es decir, los<br />
habitantes de Tesalia, Grecia central y <strong>el</strong> P<strong>el</strong>oponeso, y los tracios<br />
y macedonios. <strong>La</strong>s colonias griegas más numerosas se<br />
encontraban por las costas de Anatolia y d<strong>el</strong> Mar Negro (mucho<br />
más al oriente), e incluso las colonias italianas tanto continentales<br />
como sicilianas quedaban al sureste de Roma. Solamente siete<br />
colonias de alguna importancia se localizaban al occidente: una<br />
en Córcega, una en Cerdeña, tres en lo que es hoy la Provenza<br />
francesa (incluida Massilia, hoy Mars<strong>el</strong>la) y dos en la península<br />
ibérica. En este sentido, eran más occidentales las colonias<br />
fenicias que las griegas.<br />
3 Para algunos escandinavos todavía paganos hacia <strong>el</strong> siglo X<br />
E.C., Jesucristo era conocido como <strong>el</strong> “rey de los griegos”, “...por<br />
la vaga razón de que ése es uno de los títulos d<strong>el</strong> emperador de<br />
Constantinopla, y de que Jesucristo no es menos.” [Borges, Jorge<br />
Luis (1968). NUEVA ANTOLOGÍA PERSONAL. México: Siglo XXI<br />
<strong>Editores</strong>, pág. 220.]<br />
4 Alejandro Dumas padre, en su nov<strong>el</strong>a LOS CUARENTA Y CINCO,<br />
describe la d<strong>el</strong>egación polaca que llega a París en <strong>el</strong> siglo XVI<br />
como desplegando riquezas con ostentación “bárbara y oriental”.<br />
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