el antiguo testamento, manual para el alumno
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d<strong>el</strong> convenio sino d<strong>el</strong> mundo 1 ... desafiaba al Dios<br />
viviente" (vers. 26). No hubo ira semejante entre<br />
los hombres de Isra<strong>el</strong>, solamente un temblor de<br />
miedo por causa d<strong>el</strong> tamaño y la fuerza de Goliat.<br />
y la respuesta de David a la risa de Goliat, que se<br />
burlaba de él porque había ido a aceptar <strong>el</strong> desafío,<br />
presenta un ejemplo clásico de fe y de valor. "Tú vienes<br />
a mí", le dijo a Goliat, "con espada y lanza y<br />
jabalina; mas yo vengo a ti en <strong>el</strong> nombre de Jehová de los<br />
ejércitos . .. Jehová te entregará hoy en mi mano, . ..<br />
toda la tierra sabrá que hay Dios en Isra<strong>el</strong>. .. porque<br />
de Jehová es la batalla, y él os entregará en nuestras<br />
manos" (vers. 45-47; cursiva agregada).<br />
(25-10) 1 Samu<strong>el</strong> 17:49. El saco pastoril y la honda<br />
Los pastores de la época de David llevaban una<br />
honda y un pequeño saco de cuero o lana (una<br />
bolsa) en <strong>el</strong> cual podían llevar piedras o alimentos al<br />
lugar donde pastaban las ovejas. David empleó su<br />
bolsa pastoril <strong>para</strong> llevar las piedras que sacó d<strong>el</strong><br />
arroyo.<br />
Las hondas eran de distintos materiales, siendo de<br />
cuero las más comunes. Para pre<strong>para</strong>r <strong>el</strong> receptáculo<br />
donde se colocaba la piedra, se usaba p<strong>el</strong>o, lana,<br />
tendones de animales y juncos. Este receptáculo era<br />
sujeto con cord<strong>el</strong>es a ambos lados y teniendo <strong>el</strong> extremo<br />
de éstos en la mano, se revoleaba en <strong>el</strong> aire<br />
hasta que alcanzaba cierta v<strong>el</strong>ocidad. Al soltar de la<br />
mano una de las cuerdas, la piedra salía dis<strong>para</strong>da<br />
d<strong>el</strong> receptáculo hacia <strong>el</strong> blanco. Cualquier defecto que<br />
tuviera la piedra, la que debía ser de una redondez<br />
perfecta, afectaba la certeza d<strong>el</strong> golpe. El peso uniforme<br />
y <strong>el</strong> tamaño también tenía importancia. Antiguamente,<br />
los honderos, particularmente los pastores<br />
que disponían de tiempo, desarrollaban gran puntería<br />
y habilidad <strong>para</strong> arrojar piedras. Cuando no utilizaban<br />
las hondas, los pastores las llevaban sujetas a<br />
la frente o a la cintura.<br />
Las hondas eran bastante usadas en <strong>el</strong> <strong>antiguo</strong><br />
Cercano Oriente. Los isra<strong>el</strong>itas, que no tenían carros<br />
de guerra, empleaban a muchos expertos en <strong>el</strong> manejo<br />
de la honda. Lo mismo se aplicaba a los pueblos<br />
de las zonas vecinas.<br />
(25-11) 1 Samu<strong>el</strong> 17:52-58<br />
Estos versículos pueden llevar al lector a deducir<br />
que Saúl, que antes había conocido a David, no sabía<br />
quién era éste. La pregunta de Saúl a Abner en<br />
cuanto a quién era David significa: "¿Quién es este<br />
muchacho poseedor de tanta habilidad y valor? Obviamente<br />
hace mucho más que sólo tocar <strong>el</strong> arpa.<br />
¿Quién es Su padre? ¿De qué familia proviene?<br />
¿Dónde obtuvo semejante valor? ¿Es éste <strong>el</strong> muchacho<br />
que ha estado con nosotros durante todo este<br />
tiempo?"<br />
(25-12) 1 Samu<strong>el</strong> 18<br />
Una vez más las debilidades d<strong>el</strong> carácter de Saúl comenzaron<br />
a manifestarse. Estaba c<strong>el</strong>oso de la popularidad<br />
ganada por David (véase verso 6-8, 16).<br />
Saúl intentó de dos maneras deshacerse de David<br />
(véase verso 10-11; 21-25). Pero, aunque Saúl estaba<br />
c<strong>el</strong>oso de la creciente popularidad de David con <strong>el</strong><br />
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pueblo, no hay indicación todavía de que supiera que<br />
David había sido ungido <strong>para</strong> ser su sucesor.<br />
Aunque <strong>el</strong> pueblo de Isra<strong>el</strong> c<strong>el</strong>ebró la destreza de<br />
David en la guerra, <strong>el</strong> Señor más ad<strong>el</strong>ante indicó<br />
que a causa de sus grandes guerras, David no recibió<br />
permiso de edificar <strong>el</strong> templo. El privilegio fue dado<br />
a su hijo Salomón (véase 1 Crónicas 22:8).<br />
(25-13) 1 Samu<strong>el</strong> 19:1-11<br />
Jonatán, hijo de Saú!, fue uno de los hombres más<br />
nobles d<strong>el</strong> <strong>antiguo</strong> Isra<strong>el</strong>. Pudo haber considerado<br />
que David era una gran amenaza, tal como lo veía<br />
Saú!, siendo que <strong>el</strong> hijo mayor generalmente heredaba<br />
<strong>el</strong> trono. En cambio, Jonatán apoyó a David<br />
hasta <strong>el</strong> punto de ayudarlo a escapar de Saúl. Ciertamente,<br />
Jonatán amaba a David "como a sí mismo"<br />
(1 Samu<strong>el</strong> 18:1).<br />
(25-15) 1 Samu<strong>el</strong> 19:18-25. Samu<strong>el</strong> y la escu<strong>el</strong>a de los<br />
profetas<br />
Después que David escapó de Saúl con la ayuda de<br />
su esposa, Mical, Saúl envió mensajeros <strong>para</strong> matarlo.<br />
Pero David había buscado refugio con Samu<strong>el</strong>,<br />
en lo que los eruditos han llamado "escu<strong>el</strong>a de los<br />
profetas" (Keil y D<strong>el</strong>itzsch, Ccmmentary, 2:2, 199). Estos<br />
eruditos han mostrado que profetas como Samue!,<br />
Elías y E1iseo dirigían escu<strong>el</strong>as especiales que<br />
recibían <strong>el</strong> nombre de "compañía de profetas"<br />
(vers. 20). En otros pasajes se les conoce como "hijos<br />
de los profetas" (1 Reyes 20:35). Este hecho es de<br />
interés <strong>para</strong> los Santos de los Ultimas Días porque<br />
José Smith estableció una escu<strong>el</strong>a similar en Kirtland,<br />
Ohio, <strong>para</strong> ayudar a los poseedores d<strong>el</strong> sacerdocio<br />
en sus deberes especiales.<br />
Cuando los mensajeros de Saúl, y fir,almente Saúl<br />
mismo, llegaron, lo hicieron bajo la influencia d<strong>el</strong><br />
Espíritu, y así la vida de David fue salvada. El hecho<br />
de que la gente dijera "¿También Saúl entre los profetas?"<br />
se explicó en esta forma:<br />
Saúl "se quitó sus atavíos reales o militares, reteniendo<br />
únicamente su túnica; y continuó así todo <strong>el</strong><br />
día y toda aqu<strong>el</strong>la noche, uniéndose a los hijos de<br />
los profetas en oración, canto de alabanzas y en otras<br />
prácticas r<strong>el</strong>igiosas, los que eran poco usuales en los<br />
reyes y guerreros; y esto dio lugar al dicho ¿También<br />
Saúl entre los profetas? Trayéndolo junto con sus<br />
hombres bajo la influencia divina, Dios evitó que lastimaran<br />
a David" (Clarke, Bible Commentary, 2:274).<br />
Este acontecimiento destacable tiene un <strong>para</strong>l<strong>el</strong>o en<br />
la historia de la Iglesia. Durante su misión en Gran<br />
Bretaña, <strong>el</strong> élder Wilford Woodruff fue librado de las<br />
manos de las autoridades d<strong>el</strong> gobierno mediante la<br />
influencia d<strong>el</strong> Espíritu.<br />
"Al ponerme de pie <strong>para</strong> hablar en la casa d<strong>el</strong><br />
hermano Benbow, un hombre entró y me dijo que era<br />
un alguacil y que había sido enviado por <strong>el</strong> rector<br />
de la parroquia con una orden <strong>para</strong> arrestarme. Le<br />
pregunté: '¿Por qué d<strong>el</strong>ito?' Dijo: 'Por predicar al<br />
pueblo'. Le dije que yo, así como <strong>el</strong> rector, tenía permiso<br />
otorgado por las autoridades <strong>para</strong> predicar <strong>el</strong><br />
evang<strong>el</strong>io a la gente y que si tomaba asiento me pondría<br />
a su disposición después de la reunión. Se<br />
sentó a mi lado. Durante una hora y cuarto predi-