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el antiguo testamento, manual para el alumno

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20<br />

"Y Jehová Dios plantó un huerto en Edén, al oriente; y puso allí al<br />

hombre."<br />

"Como la causa de la transgresión fue la vida mortal,<br />

los hijos de Adán y Eva heredaron cuerpos<br />

mortales y, por lo tanto, sujetos a la muerte.<br />

"Por motivo de la caída de Adán, <strong>el</strong> Señor ocasionó<br />

cambios en la tierra <strong>para</strong> que ésta estuviera de<br />

acuerdo con la condición mortal en que se encontraba<br />

<strong>el</strong> hombre.<br />

"Para poder contrarrestar <strong>el</strong> poder que había ganado<br />

la muerte, fue necesario que hubiera 'ma expiación<br />

<strong>para</strong> pagar la deuda, y así restaurar a Adán y<br />

Eva, a toda su posteridad, y a todas las demás cosas<br />

terrenales, a la vida inmortal por medio de la resurrección."<br />

(Man, His Origin and Destiny, págs. 50-51.)<br />

(3-3) Génesis 3:1. La serpiente era la más astuta de<br />

las bestias d<strong>el</strong> campo<br />

En Génesis leemos que la serpiente le habla a Eva y<br />

la tienta <strong>para</strong> que coma d<strong>el</strong> fruto. El r<strong>el</strong>ato d<strong>el</strong> Libro<br />

de Moisés es un poco más completo y allí dice<br />

que Satanás es <strong>el</strong> que habla, pero lo hace a través<br />

de la serpiente (véase Moisés 4:6-7) . En muchos otros<br />

pasajes de las Escrituras la serpiente representa a<br />

Satanás (véase Apocalipsis 12:9; D. y C. 76:28; 84:72;<br />

88:110).<br />

(3-4) Génesis 3:3. Adán y Eva, cuando estaban en <strong>el</strong><br />

Jardín de Edén, no eran mortales y no comprendían<br />

completamente la diferencia entre lo bueno y lo malo<br />

"Encontramos, entonces, que Adán antes de la<br />

Caída:<br />

"1. No estaba sujeto a la muerte.<br />

"2. Estaba en la presencia de Dios . . .<br />

"3. No tenía posteridad.<br />

"4. No tenía conocimiento d<strong>el</strong> bien y d<strong>el</strong> mal.<br />

Tenía conocimiento, naturalmente, ya que podía<br />

hablar y dialogar. Había mucbas cosas que se le<br />

podían enseñar y que se le enseñaron; pero bajo las<br />

condiciones en las que vivía en aqu<strong>el</strong> momento,<br />

era imposible que viese o comprendiese <strong>el</strong> poder d<strong>el</strong><br />

bien y d<strong>el</strong> mal. El no sabía qué cosa era <strong>el</strong> dolor, ni<br />

<strong>el</strong> pesar, ni miles de cosas más que han venido a nosotros<br />

en esta vida y que Adán no conoció en <strong>el</strong><br />

Jardín de Edén y los cuales no podía entender ni hubiera<br />

entendido si hubiese permanecido allí. Ese<br />

era su estado antes de la Caída." (Smith, Doctrina de<br />

Salvación, Tomo 1, págs. 102-103)<br />

(3-5) Génesis 3:4-5 . Y seréis como dioses<br />

"El diablo, al tentar a Eva, le dijo la verdad al decirle<br />

que si comían d<strong>el</strong> árbol de la ciencia d<strong>el</strong> bien<br />

y d<strong>el</strong> mal serían como dioses, pero a la vez le dijo<br />

una mentira como siempre lo hace. El nunca dice<br />

la verdad completa. Les dijo que no morirían aunque<br />

<strong>el</strong> Padre les había dicho que morirían. El diablo tenía<br />

que mentir <strong>para</strong> poder conseguir su propósito,<br />

pero parte de lo que dijo era verdad. Los ojos de<br />

Adán y Eva se abrieron, y aprendieron a conocer <strong>el</strong><br />

bien y <strong>el</strong> mal, como lo hacen los dioses. Llegaron a<br />

ser como Dios en ese sentido, porque ésa es una de<br />

las características, uno de los atributos particulares<br />

de los que llegan a ese estado glorioso: entender la diferencia<br />

entre <strong>el</strong> bien y <strong>el</strong> mal." (Cannon, Cosp<strong>el</strong><br />

Truth, tomo 1, pág. 16.)<br />

(3-6) Génesis 3:6. ¿Por qué comieron d<strong>el</strong> fruto Adán<br />

y Eva?<br />

En <strong>el</strong> libro de Moisés y en Génesis se dice que Satanás<br />

se dirigió sólo a Eva, pero las rev<strong>el</strong>aciones modernas<br />

dicen que primero se le acercó a Adán, y él<br />

resistió la tentación. Satanás, sin embargo, pudo<br />

tentar a Eva, y <strong>el</strong>la comió d<strong>el</strong> fruto. Sabiendo que serían<br />

se<strong>para</strong>dos, Adán también comió. El apóstol<br />

Pablo también escribió acerca de la Caída: "Y Adán<br />

no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada,<br />

incurrió en transgresión" (1 Timoteo 2:14).<br />

El élder James E. Talmage explica que Eva, en <strong>el</strong><br />

propio acto de dejarse vencer por la tentación, cumplió<br />

con los propósitos d<strong>el</strong> Señor:<br />

"Con <strong>el</strong> pap<strong>el</strong> que representó en <strong>el</strong> gran drama de<br />

la Caída, Eva estaba cumpliendo con los fines previstos<br />

de Dios; sin embargo, no participó d<strong>el</strong> fruto<br />

prohibido con tal intención, sino con <strong>el</strong> propósito<br />

de obrar contra <strong>el</strong> mandamiento divino, pues fue engañada<br />

por las sofisterías de Satanás, quien también,<br />

en lo que a eso concierne, dio ímpetu a los fines<br />

de Dios, tentando a Eva; no obstante, su objeto fue<br />

frustrar <strong>el</strong> plan d<strong>el</strong> Señor. Terminantemente se nos<br />

dice que Satanás 'no conoCÍa <strong>el</strong> propósito de Dios;

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