11.05.2013 Views

Jotter [PDF 494 K]

Jotter [PDF 494 K]

Jotter [PDF 494 K]

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Sophie había decidido abandonar el campo, habían construido varias casas<br />

alrededor de la suya y ya no se sentía libre. Tardó bastante en vender la propiedad,<br />

después se fue de viaje con las niñas, que ya estaban acostumbradas a mudarse<br />

continuamente. Sophie pensó que quizás lamentaría la decisión, pero ya estaba<br />

hecho.<br />

—Es espantoso —le dijo Ness una mañana—. Es tan horroroso no poder ver a<br />

papá. ¿Cuándo podremos volver a verlo?<br />

Sophie se entregó a la petición de su hija, y le envió un correo electrónico a<br />

Oulipo para anunciarle que iban a verlo. A Oulipo le subió la sangre a la cabeza, ¿qué<br />

le parecía la noticia?<br />

Unos días después sonó el timbre, Oulipo salió apresuradamente hacia la<br />

puerta. Abrazó a sus hijas y después miró a Sophie. Parecía tan pura como un ángel.<br />

direcciones.<br />

—Has sido dura e injusta.<br />

—Tú eres un desgraciado, no pongas esa cara.<br />

Se besaron en silencio.<br />

—Pensé que iba a volverme loco.<br />

—Deberían ajusticiarte y sepultarte en unas ruinas.<br />

Después de haber llorado mucho, escudriñaron sus cuerpos en todas<br />

Las niñas estuvieron a punto de caer desmayadas de felicidad. ¿Estaban<br />

soñando? El dolor se mezclaba con el placer en el pecho de sus padres, que se<br />

susurraban palabras al oído.<br />

—¿Qué desgracia saldrá de esto? —preguntó Sophie en voz baja cogiendo a<br />

Oulipo de la mano.<br />

—Soy un fanático criminal que sólo provoca atrocidades, pero puedo salvarte la<br />

vida. Tú me has sometido a un castigo muy cruel.<br />

ser felices.<br />

—¿Quién eres? —Al preguntarle eso, Sophie oprimió su mano.<br />

—Estás furiosa todavía, ya sé que soy la causa. Espero que algún día podamos<br />

Al decir esas palabras, Oulipo se acercó a la ventana. Vio a una mujer de labios<br />

carnosos y largas pestañas. Una mujer contra la que una vez se había estrechado<br />

cariñosamente. Oulipo besó a Sophie en la mejilla y fue a ver a Ness y Sara, que ya se<br />

habían metido en la cama.<br />

64

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!