Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Hay algo bárbaro, característico <strong>de</strong> la sangre «piel roja», en la fiebre americana <strong>de</strong>l oro. Su<br />
ansia incesante <strong>de</strong> trabajar —que es el vicio típico <strong>de</strong>l Nuevo Mundo— está ahora llevando a la<br />
vieja Europa a la barbarie por contagio y está alimentando aquí una increíble esterilidad mental. La<br />
reflexión amplia se convierte prácticamente en una causa <strong>de</strong> remordimiento... «Haz algo en lugar<br />
<strong>de</strong> no hacer nada»; este principio es la cuerda con la que se estrangularán todas las formas<br />
superiores <strong>de</strong> cultura y gusto... Pue<strong>de</strong> que lleguemos a un punto en el que nadie ce<strong>de</strong>rá a la<br />
inclinación por la vida contemplativa sin tener mala conciencia y sentirse lleno <strong>de</strong> <strong>de</strong>sprecio por sí<br />
mismo. Sin embargo, en el pasado ocurría lo contrario; un hombre <strong>de</strong> origen noble, cuando la<br />
necesidad le obligaba a trabajar, ocultaba este hecho vergonzoso, y el esclavo trabajaba con el<br />
sentimiento <strong>de</strong> que esa actividad era esencialmente <strong>de</strong>spreciable. (Lagaya ciencia, IV, 329.)<br />
Ahora bien, la gran paradoja <strong>de</strong> nuestra época, por supuesto, consiste en que mientras<br />
que el <strong>de</strong>sdichado lumpenproletariat es mal<strong>de</strong>cido con el ocio forzoso a gran escala que es el<br />
paro permanente, los miembros <strong>de</strong> la elite culta, cuyas profesiones liberales se han<br />
convertido en máquinas sin sentido <strong>de</strong> hacer dinero, se están con<strong>de</strong>nando a sí mismos a la<br />
esclavitud <strong>de</strong> las interminables horas <strong>de</strong> trabajo, día y noche sin respiro, hasta que se<br />
<strong>de</strong>smoronan como bestias <strong>de</strong> carga sobrecargadas.<br />
19.18. El señor Meng Zhuang: hijo <strong>de</strong>l señor Meng Xian, alto funcionario <strong>de</strong> Lu.<br />
19.20. Zhouxin: véase la nota 18.1.<br />
Opinión pública: estas dos palabras no se hallan en el texto original; las he añadido para<br />
clarificar el sentido <strong>de</strong>l pasaje.<br />
19.23. Shusun Wushu: alto funcionario <strong>de</strong> Lu.<br />
Las cien estancias: «las cien guan.» El significado original <strong>de</strong> guan es «estancia»; el<br />
sentido <strong>de</strong>rivado es «oficial» (o «administrador», «funcionario»). Ambos sentidos se<br />
encuentran en las <strong>Analectas</strong>, pero la mayoría <strong>de</strong> los comentaristas creen que el primero es el<br />
que <strong>de</strong>be escogerse en este caso.<br />
19.25. Chen Zigin: véase los pasajes 1.10 y 16.13.