09.05.2013 Views

Analectas de Confucio - Laicos

Analectas de Confucio - Laicos

Analectas de Confucio - Laicos

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Capítulo 7<br />

7.1. El Maestro dijo: «Yo me limito a transmitir, no invento nada. Confío en el pasado y lo<br />

amo. En esto me atrevo a compararme con nuestro venerable Peng.»<br />

7.2. El Maestro dijo: «Acumular conocimiento en silencio, estar siempre hambriento por<br />

apren<strong>de</strong>r, enseñar a los <strong>de</strong>más sin cansarme, todo esto me surge <strong>de</strong> forma natural.»<br />

7.3. El Maestro dijo: «No cultivar la fuerza moral, no explorar lo que he aprendido, la<br />

incapacidad <strong>de</strong> seguir lo que sé que es justo, y <strong>de</strong> reformar lo que no es bueno, todas éstas<br />

son mis preocupaciones.»<br />

7.4. Cuando permanecía en su hogar, el Maestro mantenía la compostura y la alegría.<br />

7.5. El Maestro dijo: «Me estoy volviendo terriblemente viejo. Hace ya mucho tiempo que<br />

no sueño con el duque <strong>de</strong> Zhou.»<br />

7.6. El Maestro dijo: «Poned vuestro corazón en la Vía; basaos en la fuerza moral; seguid<br />

la bondad; disfrutad las artes.»<br />

7.7. El Maestro dijo: «Nunca negué mis enseñanzas a nadie que las buscase, aunque<br />

fuera <strong>de</strong>masiado pobre para ofrecer algo más que un <strong>de</strong>talle <strong>de</strong> agra<strong>de</strong>cimiento por su<br />

educación.»<br />

7.8. El Maestro dijo: «Yo instruyo sólo a los entusiastas; sólo guío a los fervientes.<br />

Destapo sólo una parte <strong>de</strong> la cuestión, y si el estudiante no pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>scubrir el resto, no digo<br />

más.»<br />

7.9. Cuando el Maestro comía cerca <strong>de</strong> alguien que estaba en duelo, nunca acababa<br />

toda su comida.<br />

7.10. El día que había llorado [por el duelo <strong>de</strong> alguien], el Maestro nunca cantaba.<br />

7.11. El Maestro dijo a Yan Hui: «Sólo tú y yo po<strong>de</strong>mos aparecer cuando se nos necesita,<br />

y <strong>de</strong>saparecer cuando somos <strong>de</strong>stituidos.»<br />

Zilu preguntó: «¿Si hubieras tenido el mando <strong>de</strong> los Tres Ejércitos, a quién habrias<br />

nombrado tu lugarteniente?» El Maestro respondió: «Como lugarteniente mío no hubiera<br />

escogido a quien lucha con tigres o atraviesa ríos sin sentir miedo. Más bien a alguien que<br />

estuviera lleno <strong>de</strong> temor antes <strong>de</strong> entrar en acción y prefiriera siempre una victoria lograda<br />

mediante la estrategia.»

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!