ST13-Estrategia para el manejo de suelos.pdf - Unesco
ST13-Estrategia para el manejo de suelos.pdf - Unesco
ST13-Estrategia para el manejo de suelos.pdf - Unesco
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
ámbito puramente científico e inci<strong>de</strong> en <strong>el</strong> <strong>de</strong> las previsiones d<strong>el</strong> comportamiento <strong>de</strong> la cuenca,<br />
sometida a unos usos concretos, ante la inci<strong>de</strong>ncia en <strong>el</strong>la <strong>de</strong> <strong>de</strong>terminados eventos torrenciales.<br />
La cuestión se pue<strong>de</strong> plantear en los siguientes términos: ¿la influencia ejercida por las<br />
cubiertas arboladas (especialmente las situadas en las áreas dominantes o <strong>de</strong> cabecera) en <strong>el</strong><br />
ciclo d<strong>el</strong> agua en la cuenca, resulta eficiente <strong>para</strong> evitar los daños por avenidas en sus valles o<br />
áreas dominadas?. La respuesta es clara: <strong>para</strong> algunas situaciones sí y <strong>para</strong> otras no;<br />
<strong>de</strong>pendiendo <strong>de</strong> la magnitud <strong>de</strong> los eventos torrenciales y d<strong>el</strong> uso que se haga <strong>de</strong> la cuenca<br />
vertiente. En este contexto es don<strong>de</strong> tiene sentido plantear tanto la or<strong>de</strong>nación agrohidrológica,<br />
como la restauración hidrológico-forestal <strong>de</strong> la cuenca vertiente, que trascien<strong>de</strong> d<strong>el</strong><br />
campo exclusivamente científico d<strong>el</strong> Proyecto EPIC FORCE, <strong>para</strong> iniciarle en <strong>el</strong> área <strong>de</strong> sus<br />
aplicaciones.<br />
Es habitual asociar a los eventos torrenciales con su probabilidad <strong>de</strong> ocurrencia, usando <strong>para</strong><br />
<strong>el</strong>lo <strong>el</strong> concepto <strong>de</strong> periodo <strong>de</strong> retorno T. De este modo, <strong>para</strong> periodos <strong>de</strong> retorno largos T L , los<br />
efectos <strong>de</strong> la cubierta arbórea en <strong>el</strong> ciclo d<strong>el</strong> agua en la cuenca vertiente resultan mo<strong>de</strong>rados,<br />
tanto más cuanto mayor es <strong>el</strong> periodo <strong>de</strong> retorno d<strong>el</strong> evento. Sin embargo, <strong>para</strong> eventos <strong>de</strong><br />
periodo <strong>de</strong> retorno cortos T C , <strong>el</strong> efecto ejercido por las mismas cubiertas arbóreas en <strong>el</strong> ciclo<br />
d<strong>el</strong> agua en la cuenca vertiente pue<strong>de</strong> ser <strong>de</strong>terminante, regulando tanto los volúmenes <strong>de</strong><br />
escorrentía directa como los caudales punta en su red <strong>de</strong> drenaje. Por esta razón es importante<br />
analizar ambos efectos a la vez, <strong>para</strong> evitar que la presentación <strong>de</strong> los resultados se interprete<br />
<strong>de</strong> forma sesgada; pues, aunque <strong>el</strong> estudio se centre únicamente en los valores d<strong>el</strong> flujo, la<br />
sociedad a la que se le transmite los pue<strong>de</strong> interpretar directamente como valores <strong>de</strong> daños y<br />
conviene aclarar este punto. Por tanto, cuando se informa a la sociedad sobre <strong>el</strong> efecto <strong>de</strong> las<br />
cubiertas arboladas en <strong>el</strong> comportamiento d<strong>el</strong> ciclo d<strong>el</strong> agua en la cuenca vertiente, se <strong>de</strong>ben<br />
precisar las dos cuestiones (que se muestran en la Figura 6.2) siguientes:<br />
a) La diferencia entre los eventos torrenciales ordinarios (que se repiten con periodos <strong>de</strong><br />
retorno cortos T C ) y eventos torrenciales extraordinarios o en <strong>el</strong> límite los eventos<br />
extremos (que tienen lugar con periodos <strong>de</strong> retorno largos T L ).<br />
b) Una función que permita r<strong>el</strong>acionar los incrementos <strong>de</strong> los volúmenes <strong>de</strong> escorrentía<br />
directa y <strong>de</strong> los caudales punta a la salida <strong>de</strong> la cuenca objeto <strong>de</strong> estudio, con los daños<br />
que razonablemente se prevén <strong>de</strong> <strong>el</strong>los.<br />
Un caudal <strong>el</strong>evado en una zona <strong>de</strong>spoblada, que no cause daños ni a personas ni a bienes, no<br />
representa ningún interés <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>el</strong> punto <strong>de</strong> vista social; ya que los daños ocasionados al medio<br />
se asumen como algo intrínseco a la dinámica torrencial, pero no ocurre lo mismo si afecta a<br />
áreas pobladas. Por tanto, es preciso realizar una valoración <strong>de</strong> los daños esperables en cada<br />
situación <strong>para</strong> <strong>el</strong> mismo caudal <strong>de</strong> avenida.<br />
En síntesis, ante los eventos torrenciales extremos las cubiertas arboladas pue<strong>de</strong>n no ser lo<br />
suficientemente eficientes, <strong>para</strong> asegurar la protección necesaria a los restantes usos a los que<br />
se <strong>de</strong>stina la cuenca; pero estos eventos son poco frecuentes. Mientras que ante eventos<br />
torrenciales ordinarios, que suce<strong>de</strong>n con mucha mayor frecuencia, las cubiertas arboladas<br />
pue<strong>de</strong>n resultar eficientes <strong>para</strong> asegurar la protección a los diferentes usos existentes en la<br />
cuenca. En consecuencia, se pue<strong>de</strong> afirmar que los beneficios que aportan las cubiertas<br />
arboladas a la cuenca (sobre todo si se sitúan estratégicamente en <strong>el</strong>la) son muy importantes,<br />
aunque en ocasiones no se perciban, tanto por los beneficios directos d<strong>el</strong> bosque en las áreas<br />
don<strong>de</strong> se asienta, como por los daños que con su presencia se evitan en las áreas dominadas <strong>de</strong><br />
147