20.10.2014 Views

ST13-Estrategia para el manejo de suelos.pdf - Unesco

ST13-Estrategia para el manejo de suelos.pdf - Unesco

ST13-Estrategia para el manejo de suelos.pdf - Unesco

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Diversos investigadores han verificado que los efectos indicados están r<strong>el</strong>acionados con la<br />

fisiología <strong>de</strong> las diferentes especies arbóreas, que alcanzan sus máximos valores <strong>de</strong><br />

transpiración coincidiendo con sus periodos <strong>de</strong> mayor crecimiento. Así lo han comprobado, por<br />

ejemplo, los hidrólogos australianos Vertessy et al., (1995, 1997, 2001) y Roberts et al.<br />

(2001) en las masas <strong>de</strong> eucaliptos; llegando a establecer que en <strong>el</strong>las se alcanza un máximo en<br />

la transpiración hacia los 15 años <strong>de</strong> edad, que se correspon<strong>de</strong> con su estado <strong>de</strong> mayor<br />

crecimiento. Parece lógico pensar que en especies <strong>de</strong> crecimiento más lento este pico en la<br />

transpiración se retrase en unos años.<br />

Resumiendo, los resultados <strong>de</strong> las experiencias efectuadas en cuencas com<strong>para</strong>das, permiten<br />

<strong>de</strong>ducir las siguientes conclusiones:<br />

a) Han contribuido a precisar las necesida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> agua en una repoblación forestal o en un<br />

repoblado natural en su fase <strong>de</strong> regeneración y en las primeras etapas <strong>de</strong> su crecimiento;<br />

sobre todo <strong>para</strong> las especies que se han utilizado en las experiencias en las cuencas<br />

com<strong>para</strong>das; lo que permite mejorar las previsiones d<strong>el</strong> resultado en <strong>el</strong> caso <strong>de</strong> una<br />

repoblación forestal, que pue<strong>de</strong> ser <strong>de</strong> gran utilidad cuando se trata <strong>de</strong> cuencas ubicadas<br />

en climas semiáridos. Por la misma razón, permiten realizar una estimación d<strong>el</strong> gasto<br />

hídrico adicional que comporta la implantación <strong>de</strong> una vegetación arbolada respecto <strong>de</strong><br />

otro tipo <strong>de</strong> cubierta vegetal, <strong>para</strong> <strong>el</strong> periodo comprendido <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que se inicia la<br />

repoblación hasta que se asegura la existencia <strong>de</strong> la masa arbolada (10-20 años,<br />

<strong>de</strong>pendiendo <strong>de</strong> la latitud y altitud d<strong>el</strong> <strong>para</strong>je en <strong>el</strong> que se ejecuta la repoblación), o<br />

simplemente se permite la invasión por <strong>el</strong> bosque d<strong>el</strong> <strong>para</strong>je en cuestión, como ocurre en<br />

ciertas regiones tropicales húmedas.<br />

b) En algunas cuencas vertientes, ante <strong>el</strong> <strong>el</strong>evado consumo hídrico que suponen las cubiertas<br />

arboladas, se pue<strong>de</strong> plantear la conveniencia <strong>de</strong> su sustitución por otras cubiertas<br />

vegetales <strong>de</strong> menor porte y consiguiente menor gasto hídrico; sobre todo cuando dicho<br />

diferencial resulta <strong>de</strong>terminante <strong>para</strong> otros fines o apremie disponer d<strong>el</strong> mismo en forma<br />

<strong>de</strong> escorrentía y su posterior almacenamiento. Conviene señalar que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una<br />

perspectiva teórica la cuestión no presenta objeciones; pero en situaciones prácticas<br />

reales es más compleja y las consecuencias pue<strong>de</strong>n no ser perceptibles a corto plazo; pues<br />

al activarse <strong>el</strong> ciclo d<strong>el</strong> agua como consecuencia d<strong>el</strong> incremento <strong>de</strong> las escorrentías, se<br />

activa también <strong>el</strong> ciclo <strong>de</strong> los sedimentos, lo que pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>rivar en una intensificación d<strong>el</strong><br />

geo-dinamismo torrencial en la cuenca, que se <strong>de</strong>be tratar <strong>de</strong> evaluar y prevenir.<br />

c) Cuando se introducen pastizales en estaciones con capacidad <strong>para</strong> acoger <strong>el</strong> arbolado, <strong>el</strong><br />

agua sobrante se transforma en escorrentía, que pue<strong>de</strong> ser almacenada <strong>para</strong> su<br />

aprovechamiento directo inmediato; pero este incremento <strong>de</strong> la escorrentía también pue<strong>de</strong><br />

aumentar la erosión d<strong>el</strong> su<strong>el</strong>o y <strong>el</strong> consiguiente transporte <strong>de</strong> los sedimentos; alterando así<br />

la situación <strong>de</strong> equilibrio inicial que es sustituido por una nueva fase <strong>de</strong> equilibrio, que<br />

supone una menor protección <strong>de</strong> la cuenca ante los eventos torrenciales, especialmente<br />

ante los extremos. Aunque conviene precisar que a largo plazo los eventos torrenciales<br />

ordinarios pue<strong>de</strong>n causar un mayor <strong>de</strong>terioro en la cuenca, cuando sus efectos sobre <strong>el</strong><br />

su<strong>el</strong>o son continuados y no se corrigen a su <strong>de</strong>bido tiempo. Bruijnze<strong>el</strong> et al. (2005)<br />

recuerdan las enseñanzas que la investigación ha aportado al efecto: 1) El incremento<br />

total y estacional <strong>de</strong> las escorrentías en áreas <strong>de</strong>stinadas a pastos o a cultivos, sólo se<br />

presenta si la capacidad <strong>de</strong> infiltración d<strong>el</strong> su<strong>el</strong>o se mantiene tras la tala d<strong>el</strong> bosque,<br />

siendo los su<strong>el</strong>os <strong>de</strong> textura fina los más vulnerables a la <strong>de</strong>gradación. 2) El uso d<strong>el</strong> su<strong>el</strong>o<br />

tras la tala d<strong>el</strong> bosque <strong>de</strong>be contar con una buena cubierta <strong>de</strong> vegetación superficial; pues<br />

en caso contrario los caudales generados por los aguaceros intensos e incluso mo<strong>de</strong>rados,<br />

58

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!