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(AA.VV) Antología universal del relato fantástico

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madura conserva inmaculada toda su juventud. Siempre duerme sobre el lado izquierdo y tiene unas<br />

pesadillas en las que desciende a tenebrosas regiones. Pero lo más extraño de todo es la protuberancia<br />

de su espalda, que insinúa levemente el nacimiento de un ala. La correspondencia entre esta mujer<br />

misteriosa con las islas nacientes, metáfora de las fuerzas elementales de la naturaleza y de la vida,<br />

encarna perfectamente el misterio <strong>del</strong> eterno femenino. [28]<br />

—Sueño y realidad. Según el Vedanta, el alma crea el mundo y lo despliega en su propia<br />

imaginación. Esta idea recorre los siglos y todas las culturas de la Tierra. En Asia la encontramos muy<br />

desarrollada en el budismo; también en el hinduismo y en el taoísmo; en Occidente, en Platón, Leibniz,<br />

en las Meditaciones metafísicas, de Descartes y, sobre todo, en Berkeley. La literatura tampoco<br />

desperdició esta hermosa metáfora desde Shakespeare y los poetas isabelinos a Calderón de la Barca.<br />

En fechas más recientes, retorna con toda brillantez en Io, de Oliver Onions, y en La noche boca arriba,<br />

de Cortázar. La visita <strong>del</strong> caballero enfermo, de Papini, es una melancólica reflexión sobre la ilusoria<br />

condición humana, pero enriquecida con una idea mucho más inquietante: ¿quién es el que me sueña?<br />

¿Quién es ese ignoto ser que yo no conozco y al que pertenezco? En Las ruinas circulares, Borges<br />

retoma esta antigua conjetura a partir <strong>del</strong> laberíntico pasaje de Alicia a través <strong>del</strong> espejo, en el que<br />

Alicia está soñando con el Rey Rojo, el cual sueña a la par con Alicia, que a su vez sueña con el Rey<br />

Rojo, y así sucesivamente. Acaso el cuento de Borges sea el ejemplo más perfecto de esta pesadilla<br />

soñada por todos.<br />

El pie de la momia es un cuento <strong>del</strong>iberadamente ligero. Gautier nos revela en él toda su pasión<br />

colorista por el Antiguo Egipto, y aunque el recurso <strong>del</strong> sueño parece en principio fácil, todo da un giro<br />

completo cuando el protagonista encuentra, al despertar, un precioso objeto procedente <strong>del</strong> lugar que<br />

había visitado en sueños.<br />

—Alucinaciones. Por último, volvemos a la perenne duda —primer requisito de lo fantástico—<br />

sobre la naturaleza de los hechos narrados: si realmente son fabulosos y sobrenatura, o si son obra <strong>del</strong><br />

pathos, como sucede con la mujer <strong>del</strong> <strong>relato</strong> de Perkins Gilman, enloquecida por los monstruos que se<br />

esconden en el empapelado de su cuarto; o la locura de Monkton, que pone en tela de juicio toda la<br />

historia narrada. Pero ¿acaso no ocurre lo mismo con el estudiante de Ewers o el deslumbrado escritor<br />

de Onions?<br />

El personaje de El ángulo <strong>del</strong> horror, de Cristina Fernández Cubas, descubre, primero a través de un<br />

sueño, cierta apertura en la mente desde la cual puede verse otra parte de la realidad. Quien asume esta<br />

nueva perspectiva sufre un proceso psicótico, que contagia a su hermana. Pero el cuento admite varias<br />

lecturas, y, por encima de todo, es una perfecta metáfora sobre el punto de vista desde el cual parte toda<br />

la literatura fantástica. [29]<br />

Masud también nos habla de ciertos lugares ocultos de las casas en donde se experimenta miedo o<br />

deseo. Pero ¿cuál es la legitimidad de este sentimiento? ¿Cuál es su realidad o irrealidad? La literatura<br />

fantástica responde a esta pregunta con metáforas: lo extraño, lo numinoso, lo extraordinario, sólo<br />

permite aproximaciones, analogías, imágenes. Ésta es la sintaxis de su poética. Como dice Hamlet:<br />

«Hay más cosas en el cielo y en la tierra, Horacio, que el sueño de tu filosofía». Tal es el punto de<br />

partida <strong>del</strong> que arrancan todos estos cuentos, y sin embargo, la tragedia de Hamlet es siempre la duda.<br />

El gusano en el fruto <strong>del</strong> Paraíso.

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